El diseño gráfico es la profesión y disciplina académica cuya actividad consiste en proyectar comunicaciones visuales destinadas a transmitir mensajes específicos a grupos sociales con objetivos determinados. Opuesto al arte, cuyo objetivo es meramente la contemplación, el diseño se basa en el principio de «la forma sigue a una función específica».[2]
El diseño gráfico es una rama interdisciplinaria del diseño,[1] cuyos fundamentos y objetivos giran en torno a la definición de problemas y determinación de objetivos para la toma de decisiones a través de la creatividad, la innovación y el pensamiento lateral junto con herramientas manuales o digitales, transformándolos para su debida interpretación. Esta actividad ayuda a la optimización de las comunicaciones gráficas. También es conocido como diseño de la comunicación visual y diseño visual.
El rol que cumple el diseñador gráfico en el proceso de comunicación es el de codificador o intérprete del mensaje. Trabaja en la interpretación, ordenamiento y presentación de los mensajes visuales. El trabajo de diseño puede partir de la demanda de un cliente, demanda que acaba por establecerse lingüísticamente, ya sea de manera oral o escrita, es decir, que el diseño gráfico transforma un mensaje lingüístico en una manifestación gráfica.[3]
El diseño gráfico tiene, como campo de aplicación, diferentes áreas del saber enfocadas a cualquier sistema de comunicación visual. Por ejemplo, puede aplicarse en estrategias publicitarias, o también, aplicarse en el mundo de la aviación[4][5] o la exploración espacial.[6][7] En este sentido, en algunos países se relaciona diseño gráfico como únicamente asociado a la elaboración de bocetos y dibujos, ello es incorrecto, ya que la comunicación visual es una pequeña parte de un enorme abanico de tipos y clases donde puede aplicarse.
Con orígenes en la antigüedad y la Edad Media,[8] el diseño gráfico surgió como una profesión distinta en Occidente en el siglo xix y su evolución permitió su consolidación en el siglo xx. Dado el crecimiento veloz y masivo en el intercambio de información en la actualidad, la demanda de diseñadores experimentados es mayor que nunca, particularmente a causa del desarrollo de nuevas tecnologías y de la necesidad de prestar atención a los factores humanos que escapan a la competencia de los ingenieros que las desarrollan.[9]
La definición de la profesión del diseñador gráfico es más bien reciente, en lo que se refiere a su preparación, su actividad y sus objetivos. Aunque no existe consenso sobre una fecha exacta en la que nació el diseño gráfico, algunos lo datan durante el período de entreguerras. Otros entienden que comienza a identificarse como tal para finales del siglo xix.[8]