Imperio Medio de Egipto


El Imperio Medio (ca. 2050 - 1750 a. C.), se inicia con la reunificación de Egipto bajo por Mentuhotep II, a mediados de la dinastía XI, dando fin al denominado Primer periodo intermedio de Egipto. Esta época comprende la segunda parte de la dinastía XI y la dinastía XII.

Algunos egiptólogos consideran que las dinastías XIII y XIV también pertenecen al Imperio Medio de Egipto.[1]

Le siguió el Segundo periodo intermedio de Egipto, en el que vuelve a perderse la unidad política en Egipto.

A pesar de la unificación, bajo los gobernantes tebanos los nomarcas seguían teniendo bastante poder dentro de sus tierras en los principios del periodo. El primer objetivo de Mentuhotep, después de conquistada la ciudad de Heracleópolis, fue lograr la dominación efectiva en todo el reino. Para ello realizó una serie de intervenciones políticas en los nomos, deponiendo a gobernadores desleales o rebeldes, reemplazándolos por hombres fieles, directamente designados por el faraón, o asegurándose la sumisión de otros, sin destituirlos, y premiando a los adictos. Subordinó el nomo de Heracleópolis (rival de Tebas durante el Primer periodo intermedio) al de la ciudad vecina de Heliópolis, antiguo centro religioso.

También impuso presencia del ejército y planteo el sistema administrativo: restituyó a los inspectores reales (especialmente en Heracleópolis) y al cargo de Chaty (primer ministro) y nombró gobernadores directos en el Bajo Egipto, en el desierto oriental y en la frontera con Nubia. A pesar de todo, en muchos nomos, principalmente del Egipto Medio, solo logró establecer un sistema de tipo casi feudal, es decir, de simple lazo de fidelidad nomarca-faraón, sin un gobierno central directo, además el rey era asesorado por el llamado Consejo de Grandes; todo esto hacía imposible un verdadero poder absoluto, como el del Imperio Antiguo, no lográndose tampoco una dominación plena. Mentuhotep intentó dar la imagen de rey de todo Egipto, como entidad política y cultural, como considerarse sobrino de Ra. En cuanto a su actividad militar, centró sus campañas en Nubia, con el objetivo de restablecer las rutas comerciales y la explotación minera. El otro foco de atención exterior fue reforzar las fronteras del delta del Nilo para impedir gente de pueblos nómadas.

La dinastía XI desapareció después de una sucesión de reyes débiles, desatándose una crisis sucesoria. El chaty Amenemhat, originario del Alto Egipto, logró finalmente imponerse tras derrotar a un pretendiente al trono surgido en la región de Nubia. Amenemhat I (1991-1962 a. C.) y justificó su ascensión mediante la denominada Profecía de Neferti:


Mentuhotep II, el primer faraón del Imperio Medio, representado como el dios Osiris.
Antiguo Egipto: Imperio Antiguo e Imperio Medio.
Estatuilla de Iby-ref: nomarca del Imperio Medio.