Las lenguas afroasiáticas son una familia de lenguas que consta de unas 240 lenguas habladas por unos 400 millones de personas distribuidas por el Norte de África, África Oriental, el Sahel y Asia Occidental.
Otros glotónimos con los que se conoce o ha conocido a algunas de las lenguas afroasiáticas son "camítico-semítico" (no recomendable), "hamito-semíticas" (desaprobado), "Lisramic" (Hodge 1972), "Erythraean" (Tucker, 1966). Aunque el término camítico-semítico (antiguo) se ha usado en algunos textos como sinónimo de afroasiático (moderno), ambas agrupaciones no incluyen exactamente las mismas lenguas. Concretamente, algunas lenguas consideradas previamente como camíticas no parecían emparentadas con el resto, mientras que otras lenguas que habían sido excluidas de entre las camíticas tenían importantes parecidos con la familia. Por eso se redefinió por completo la familia y sus subgrupos y se le dio un nombre nuevo.
Se han hecho diversas propuestas sobre el lugar donde se habló protoafroasiático. Algunos como Ígor Diákonov o Lionel Bender sugieren África, particularmente Etiopía, debido a la gran diversidad de lenguas afroasiáticas que allí se encuentran. Alexander Militarev se inclina por situarla al oriente, relacionándola con la cultura natufiense. Y finalmente Christopher Ehret (1995) sugiere la costa occidental del mar Rojo y ha propuesto una serie de fases de expansión a partir del 11500 a. C., que muestran un acuerdo razonable con los datos arqueológicos.
Las lenguas semíticas son la única subfamilia afroasiática que se encuentra fuera de África. Sin embargo, en tiempos históricos o protohistóricos, algunos hablantes de lenguas semíticas volvieron desde el sur de Arabia a Etiopía. Es por esto por lo que algunas lenguas etíopes (tales como el amárico) son semíticas en vez de pertenecer al substrato de los grupos cusita u omótico. (Una minoría de académicos, tales como A. Murtonen (1967), están en desacuerdo con esta teoría, y sugieren que la familia semítica puede haberse originado en Etiopía).
Según Ehret (1996), las lenguas tonales afroasiáticas pertenecen a las ramas omóticas, chádicas y cushitas orientales y meridionales. Las ramas semítica, bereber y egipcia no son tonales.
Los grupos 2-3 previamente se agruparon dentro de una supuesta agrupación camítica, pero no parece que existan criterios sólidos para agruparlas juntas dentro de la familia. La lengua ongota suele clasificarse dentro de las afroasiáticas, pero no hay consenso a cerca de su clasificación dentro de la familia (en parte por falta de información). Harold Fleming sugiere que podría ser una rama independiente dentro de las lenguas afroasiáticas que no es omótica.