The Journalist's Creed es una afirmación personal y profesional y un código de ética periodística escrito por Walter Williams en 1914. El credo se ha publicado en más de 100 idiomas, y una placa de bronce de The Journalist's Creed cuelga en el National Press Club en Washington, DC Williams fue el decano fundador de la Escuela de Periodismo de Missouri .
El credo del periodista
- Creo en la profesión de periodista.
- Creo que la revista pública es un fideicomiso público; que todos los relacionados con él son, en la medida de su responsabilidad, fideicomisarios del público; que la aceptación de un servicio menor que el servicio público es una traición a esta confianza.
- Creo que el pensamiento claro y las declaraciones claras, la precisión y la justicia son fundamentales para un buen periodismo.
- Creo que un periodista debe escribir solo lo que tiene en su corazón para que sea verdad.
- Creo que la supresión de las noticias, por cualquier otra consideración que no sea el bienestar de la sociedad, es indefendible.
- Creo que nadie debería escribir como periodista lo que no diría como caballero; que el soborno con el bolsillo de uno debe evitarse tanto como el soborno con el bolsillo de otro; que la responsabilidad individual no puede escaparse alegando las instrucciones de otro o los dividendos de otro.
- Creo que la publicidad, las noticias y las columnas editoriales deben servir por igual a los mejores intereses de los lectores; que prevalezca para todos una norma única de verdad útil y limpieza; que la prueba suprema del buen periodismo es la medida de su servicio público.
- Creo que el periodismo que mejor triunfa —y que mejor merece éxito— teme a Dios y honra al hombre; es decididamente independiente, indiferente al orgullo de opinión o codicia de poder, constructivo, tolerante pero nunca descuidado, autocontrolado, paciente, siempre respetuoso con sus lectores pero siempre sin miedo, se indigna rápidamente ante la injusticia; no se deja llevar por la apelación del privilegio o el clamor de la turba; busca dar a cada hombre una oportunidad y, en la medida en que la ley, el salario honesto y el reconocimiento de la hermandad humana lo permitan, una oportunidad igual; es profundamente patriótico al tiempo que promueve sinceramente la buena voluntad internacional y consolida la camaradería mundial; es un periodismo de humanidad, de y para el mundo de hoy.
Referencias
- Un credo para mi profesión: Walter Williams, periodista para el mundo por Ronald T. Farrar University of Missouri Press, 1998, ISBN 0-8262-1188-7