La clasificación de accidentes es un método estandarizado en el análisis de accidentes mediante el cual las causas de un accidente, incluidas las causas fundamentales, se agrupan en categorías. La clasificación de accidentes se utiliza principalmente en la aviación, pero se puede ampliar a otras áreas, como el ferrocarril o la atención médica. Si bien los informes de accidentes son muy detallados, el objetivo de la clasificación de accidentes es tener un panorama más amplio. Al analizar una multitud de accidentes y aplicar el mismo esquema de clasificación estandarizado, se pueden detectar patrones en cómo se desarrollan los accidentes y se pueden construir correlaciones. La ventaja de una clasificación estandarizada de accidentes es que se pueden utilizar métodos estadísticos para obtener más información sobre las causas de los accidentes.
Una buena taxonomía de clasificación de accidentes también es adecuada para la investigación de incidentes. La diferencia entre un accidente y un incidente es el estado final. Si bien el estado final en un incidente siempre es recuperable, no lo es en un accidente. Ejemplos de un estado final en aviación: en un incidente, el estado final podría ser un "Vuelo controlado hacia el terreno" que luego se recupera, mientras que en un accidente sería un "Vuelo controlado hacia el terreno", que no se puede recuperar. Los factores causales que conducen a cualquiera de ellos pueden analizarse con un mismo sistema de clasificación de accidentes.