El autocross en Australia es un tipo de deporte automovilístico sancionado por la Confederación de Automovilismo Australiano (CAMS), que lo define como un evento de velocidad que se lleva a cabo en una pista de tierra de menos de dos kilómetros de largo. Los corredores están cronometrados contra el reloj, con el objetivo de completar el recorrido en el menor tiempo posible. [1]
Esta forma de carrera sirve como introducción a los rallyes. Algunos eventos se llevan a cabo al atardecer para intensificar el desafío.
Las regulaciones de CAMS requieren que un conductor en un evento de velocidad tenga al menos 14 años. Los competidores requieren una licencia de Nivel 2 de Velocidad (L2S) o Nivel 2 de Velocidad Junior (L2SJ).
La Victorian Club Autocross Series tiene tres clases de pilotos: Ladies, Open y Junior (siendo menores de 18 años al comienzo de la temporada).
Tanto los pilotos aficionados como los experimentados pueden competir libremente, lo que convierte al Autocross en una buena introducción a otras formas de deportes de motor.
Si bien CAMS define las clases de vehículos como libres a discreción de los directores de eventos, especifica que los vehículos deben cumplir con los requisitos básicos.