Bertha (también Berta ) (c.880-después de 952), era la hija de Berengario I de Italia y su esposa Bertila de Spoleto . Fue abadesa de Santa Giulia en Brescia desde al menos 908 hasta su muerte, y de San Sisto en Piacenza desde al menos 917 hasta su muerte.
Bertha era miembro de la dinastía Unruoching . Sus padres fueron Berengario I, rey de Italia y Bertila. [1] Su hermana era Gisela de Friuli , cuyo hijo Berengario II más tarde se convirtió en rey de Italia.
Una carta del arzobispo Juan de Rávena indica que Bertha ya era abadesa de Santa Giulia en Brescia en 908. [2] El monasterio de Santa Giulia (anteriormente San Salvatore) en Brescia era una de las casas religiosas femeninas más ricas e influyentes del norte de Italia. . [3] Estaba estrechamente relacionado con mujeres reales, incluida Engelberga , la tía abuela materna de Bertha.
En 915 y 916, Berengario hizo dos concesiones separadas, a pedido de Bertha: una a su monasterio de Santa Giulia en Brescia y la otra otorgando a Bertha el derecho a construir un castillo en Pavía. [4]
Un diploma emitido por Berengario en 917 indica que, además de Santa Giulia en Brescia, Bertha era ahora también la abadesa de San Sisto en Piacenza , que había sido fundada por su tía, Engelberga. [5]
Sucesivos reyes de Italia otorgaron concesiones a San Sisto mientras Berta era abadesa: Rodolfo II en 924, Hugo en 926 y el sobrino de Berta, Berengario II y su hijo, Adalberto en 951. [6]