justicia cognitiva


El concepto de justicia cognitiva se basa en el reconocimiento de la pluralidad de saberes y expresa el derecho a la coexistencia de las distintas formas de saber. [1]

El erudito indio Shiv Visvanathan acuñó el término justicia cognitiva en su libro de 1997 "Un carnaval para la ciencia: ensayos sobre ciencia, tecnología y desarrollo". [2] Al comentar sobre el impacto destructivo de la ciencia occidental hegemónica en los países en desarrollo y las culturas no occidentales, Visvanathan pide el reconocimiento de las ciencias alternativas o formas de conocimiento no occidentales. Argumenta que diferentes conocimientos están conectados con diferentes medios de vida y estilos de vida y, por lo tanto, deben ser tratados por igual.

La justicia cognitiva es una crítica al paradigma dominante de la ciencia moderna [3] y promueve el reconocimiento de paradigmas alternativos o ciencias alternativas al facilitar y permitir el diálogo entre conocimientos , a menudo inconmensurables . Estos diálogos de saberes se perciben como una contribución a un mundo más sostenible, equitativo y democrático.

El llamado a la justicia cognitiva se encuentra en una variedad creciente de campos, como la etnobiología , [4] la tecnología y el diseño de bases de datos , [5] y las tecnologías de la información y la comunicación para el desarrollo (ICT4D). [6]

La académica sudafricana y experta en educación de la UNESCO Catherine Odora Hoppers escribió sobre la justicia cognitiva en el campo de la educación. [7] Sostuvo que los saberes indígenas tienen que ser incluidos en los diálogos de saberes sin tener que encajar en las estructuras y estándares del saber occidental. Cuando los conocimientos indígenas se tratan por igual, pueden desempeñar su papel en la creación de una ciencia más democrática y dialógica, que permanece conectada con el sustento y la supervivencia de todas las culturas. [7]