Dark-Hunter es un término de una serie de fantasía y romance paranormal de Sherrilyn Kenyon . [1] [2] Kenyon comenzó a escribir la serie en 1986 en revistas de terror, fantasía y ciencia ficción. [3]
Los Dark-Hunters son guerreros inmortales que venden sus almas a la diosa griega Artemisa por un acto de venganza contra quien los asesinó.[3] Una vez que se han vengado, se dedican a defender a la humanidad contra los Daimons (una raza psíquica maldecida por Apolo)[4] y otros enemigos sobrenaturales.
Sabía del amor y la compasión de Acheron por los humanos y su falta de voluntad para permitir que otros sufrieran cuando podía detenerlo. Sabiendo esto, ella creó a sus guerreros inmortales y lo manipuló para que los dirigiera, entrenara y fuera responsable de ellos. No cualquiera puede convertirse en un Cazador Oscuro, ni el proceso es fácil.
Una persona debe morir como resultado directo de una terrible traición, como que su mejor amigo o un familiar la asesinen de manera brutal. En el momento de su muerte, su alma clamará por venganza lo suficientemente fuerte como para ser escuchada por Artemisa en el Monte Olimpo. Al llegar, le ofrece a la persona una opción: la muerte verdadera o intercambiar su alma con ella para resucitar como Cazador Oscuro. A cambio de su alma y servicio en su ejército de Cazadores Oscuros, Artemisa les da 24 horas para vengarse de quienes los traicionaron. Después de que hayan pasado esas 24 horas, deben cumplir con su deber para con la humanidad y cazar a los Daimons que se aprovechan de los humanos.
Cuando un Cazador Oscuro mata a un Daimon, libera cualquier alma humana que el Daimon haya robado, siempre que el Cazador Oscuro encuentre al Daimon lo suficientemente rápido. Si el Daimon no muere poco después de tomar el alma del humano, el alma morirá por estar en el recipiente equivocado y no podrá pasar a la otra vida a la que estaba destinado a ir después de su muerte.
Los Cazadores Oscuros trabajan individualmente, cada uno de ellos tiene un territorio que vigilar. No pueden estar muy cerca el uno del otro por más de un corto período de tiempo sin agotar los poderes del otro. Además, cualquier daño físico causado por un Cazador Oscuro a otro hará que el primer Cazador Oscuro sufra el mismo dolor físico o se multiplique por diez.