Gestión de relaciones con los empleados


La gestión de relaciones con los empleados ( ERM ) [1] se considera un campo específico de la gestión de recursos humanos. ERM es el proceso de adopción de métodos y prácticas de control para regular las relaciones con los empleados. Uno de los principales objetivos asociados con la gestión de las relaciones con los empleados se centra en establecer y retener relaciones productivas de los empleados dentro de una empresa.

Un gran componente de ERM es la comunicación organizacional eficaz. Esto conduce a un aumento de la confianza, la confianza y la lealtad de los empleados. Al gestionar eficazmente las relaciones, una empresa puede determinar si se están cumpliendo o no los objetivos de la empresa.

La gestión de las relaciones con los empleados se ha centrado en permitir que los empleados colaboren en las tareas de gestión típicas con sus empleadores. Al involucrar aportes de ambos lados de la relación laboral, las plataformas de ERM tienen como objetivo alinear los intereses de ambas partes, el trabajador y el empleador, e informar las funciones comerciales diarias bajo un flujo de trabajo optimizado.

Al analizar el concepto de Gestión de las relaciones con los empleados, es imperativo que uno comprenda los múltiples componentes y funciones de ERM para construir relaciones sólidas entre los empleados y la empresa.

Después de considerar estos componentes y funciones que son esenciales para comprender ERM, uno debe mirar este concepto en relación con el ciclo de vida del empleado.

Las relaciones sólidas entre empleador y empleado comienzan con la comercialización de puestos de trabajo para los candidatos y la forma en que una empresa analiza cómo es trabajar para la empresa. Esto significa que no hay simplemente una publicación de la descripción del trabajo en una bolsa de trabajo, sino una discusión sobre cómo es la experiencia de trabajar para la empresa, así como el tipo de contribuciones que la empresa está buscando en su candidato ideal. Además, el candidato debe tener en cuenta la facilidad de solicitud y, al mismo tiempo, garantizar que se recopile suficiente información para el empleador.