federico de roberto


Federico De Roberto (16 de enero de 1861 - 26 de julio de 1927) fue un escritor italiano, conocido por su novela histórica I Viceré (1894), traducida como Los virreyes .

De Roberto nació en Nápoles y comenzó su carrera como escritor como periodista de periódicos nacionales, donde conoció a Giovanni Verga y Luigi Capuana , los escritores más destacados del movimiento verista . Verga lo introdujo en los círculos literarios de Milán . De Roberto es autor de dos libros de cuentos: La sorte (1887), Documenti umani (1888). Su primera novela, Ermanno Raeli , (1889) es en gran parte autobiográfica; más profundo en el análisis psicológico es el segundo, L'illusione (1891). En 1894 su novela Yo Viceréfue publicado. Fue el resultado de años de arduo trabajo, pero obtuvo poco éxito tras su lanzamiento. La desilusión y los trastornos nerviosos indujeron a De Roberto a retomar el trabajo periodístico: se convirtió en escritor del Corriere della Sera y el Giornale d'Italia . Sólo más tarde, tras cierta experiencia como dramaturgo, volvió a la novela, con L'Imperio (1908-1913), secuela inacabada de I Viceré . Murió en Catania .

La novela consta de tres partes y se basa en la historia de los ficticios príncipes Uzeda de Francalanza, una familia noble de Catania de origen español. Esta familia sirvió como virreyes durante el dominio español anterior. La trama, centrada en el trasfondo social y político de la época, sigue la historia privada de los Uzeda durante el último año de la dominación borbónica en el Reino de las Dos Sicilias y las primeras décadas del Reino de Italia , retratando la transición de un estado feudal a un sistema parlamentario . De Roberto usa el estilo literario del Verismo (el equivalente italiano del Naturalismo) y no adopta un punto de vista privilegiado (ni del autor ni de otros), sino una pluralidad de voces. Están presentes escenas de masas, así como la descripción detallada de varios trasfondos sociales. El objetivo principal de todos los miembros de la familia Uzeda es conservar el poder independientemente de los cambios que se produzcan, incluso si esto requiere acciones que el lector sin duda juzgará cínicas o incluso absurdas. De Roberto retrata un mundo que atraviesa un cambio fundamental, pero aparentemente no tiene esperanza para el futuro: ningún aspecto de la sociedad se representa libre de corrupción.