El reflejo de fijación es el que se ocupa de atraer la mirada hacia un objeto periférico. Por ejemplo, cuando una luz brilla en la periferia, los ojos cambian la mirada hacia ella. Está controlado por el lóbulo occipital de la corteza cerebral, corroborado por tres pruebas principales:
- La eliminación de la corteza provoca el cierre de este reflejo.
- Dibujar una figura en la superficie de la corteza causará movimientos oculares en la dirección en que se viaja.
- Detectar una imagen registrando las señales reales de los ojos
Investigaciones anteriores declaran que una vía motora desde la corteza occipital hasta las neuronas motoras del tronco encefálico era a través de los colículos superiores. Este es el caso en los animales inferiores, pero en los humanos, la teoría de que los núcleos de los músculos oculares, además de los colículos superiores del mesencéfalo, se sostiene ahora en general.
Cuando un objeto se enfoca directamente en un objeto pero los ojos se desvían de su objetivo, el reflejo de fijación mantiene los ojos enfocados en el objeto original, aunque se mueva.
Ver también
Bibliografía
- "ojo humano". Encyclopædia Britannica. 2008. Encyclopædia Britannica 2006 Ultimate Reference Suite DVD