Después de perder la cobertura médica y tener un caso severo de asma, viajó desde Santa Cruz, California a Camerún , e intencionalmente se infectó con anquilostomiasis. [1]
Cuando funcionó, Lawrence se convirtió en un defensor de la terapia antihelmíntica. Regresó a los Estados Unidos y fundó una empresa de Internet que vendía kits de anquilostomiasis. Llamó la atención de la FDA a través de una historia de ABC, [2] que lo acusó de vender productos farmacéuticos sin licencia y huyó de los Estados Unidos. [3] [4]