En los negocios, un hacedor de lluvia es una persona que genera nuevos negocios y gana nuevas cuentas casi por arte de magia , ya que a menudo no es evidente cómo se origina esta nueva actividad comercial. Significa generar nuevos negocios sustanciales o flujo de caja adicional [1] de fuentes a veces fuera de los canales comerciales establecidos, a veces al conectarse con personas en mercados ocultos o no tradicionales, y a veces incitando a los clientes actuales a gastar más dinero. Un hacedor de lluvia suele ser una figura clave en la empresa u organización, [2] no solo un vendedor , sino un director o ejecutivo que suele ser muy apreciado dentro de la empresa. [3]
El origen del sentido comercial de hacedor de lluvia puede ser una alusión a la práctica de los nativos americanos de bailar para alentar a las deidades a traer la lluvia necesaria para los cultivos. En verano, durante una sequía, por ejemplo, el hacedor de lluvia bailaba y cantaba canciones en las llanuras, y otros en la tribu creían que la actividad hacía que las nubes vinieran mágicamente y trajeran la lluvia que da vida. [4] Por analogía, un hacedor de lluvia de negocios traería mágicamente nuevos negocios y clientes a una empresa o generaría más ingresos de los clientes y donantes existentes, y la lluvia es una metáfora del dinero. [5]