Los vivos


The Living es una película dramática estadounidense de 2014 escrita y dirigida por Jack Bryan. Está protagonizada por Fran Kranz, Jocelin Donahue, Kenny Wormald, Chris Mulkey y Joelle Carter. Teddy (Kranz) se entera de que ha golpeado a su esposa, Molly (Donahue), en un estado de ebriedad. Su hermano, Gordon (Wormald), contrata a un ex convicto (Mulkey) para matar a Teddy. La película se estrenó en el Festival de Cine de Manhattan de 2014 .

Teddy se despierta de una noche de borrachera. Falta su anillo de matrimonio y su puño está ensangrentado. Cuando no puede encontrar a su esposa, Molly, visita la casa de su suegra. Allí, la madre de Molly, Angela, y su hermano, Gordon, explican que ella no quiere tener nada que ver con él, ya que él la golpeó brutalmente mientras estaba borracho. Teddy protesta que no recuerda el incidente y pide disculpas a Molly. Angela y Gordon lo advierten; para su consternación, Molly se va con Teddy, aunque le advierte que no se trata de una reconciliación. Ella solo regresa a la casa, no a su relación. Al mismo tiempo, Angela reprende a Gordon por no defender más a su hermana.

En un bar, Gordon le dice a un amigo que quiere a Teddy muerto. Su amigo sugiere que un amigo de un amigo, un ex convicto, puede estar dispuesto a aceptar el trabajo barato. Gordon no responde y, en cambio, sugiere que regresen al trabajo. Allí, en un supermercado, se encuentra con Teddy y Molly, quienes no se dieron cuenta de que había intercambiado turnos. Después de disculparse por su comportamiento, Teddy le da a Gordon la oportunidad de lanzarle un puñetazo. Gordon declina torpemente y una vez más le dice a su amigo cuánto desearía que Teddy estuviera muerto. Su amigo se ofrece a conseguir el número del ex convicto y Gordon acepta sin comprometerse. En su casa, Angela vuelve a regañar a Gordon por no ser lo suficientemente asertivo como para pedir una mejor paga.

En su casa, Molly insiste en que Teddy se mude, aunque acepta darle la oportunidad de hacer las paces con una cita para cenar al día siguiente. Ella elige un restaurante local y se encuentran con varios de sus amigos, quienes están demasiado avergonzados para comentar sobre su apariencia maltratada. Cuando Gordon recibe el número de teléfono del ex convicto de su amigo, se entera de que el hombre, Howard, vive en Mississippi. Howard insiste en que Gordon conduzca desde Pensilvania hasta su casa para discutir el asunto. Cuando llega Gordon, Howard lo obliga a desnudarse para demostrar que no está conectado y acepta el trabajo.

Mientras conducen de regreso, Gordon se preocupa cada vez más por el temperamento violento de Howard y comienza a tener dudas. En un restaurante al borde de la carretera, Howard asesina a dos personas y le dice a Gordon que tomará su dinero de una forma u otra, pero es demasiado tarde para dejar de pagarle. Después de burlarse de Gordon con amenazas de asesinarlo, Howard expone su filosofía: considera que sus acciones afectan más a los sobrevivientes que a sus víctimas, ya que los vivos son los que deben lidiar con el dolor de la pérdida. Mientras tanto, Teddy y Molly se reconcilian lentamente y Molly le permite regresar a su casa.

Gordon regresa a Pensilvania a tiempo para cenar con Teddy, Molly y Angela. La reunión es un desastre; después de una recepción fría, Angela exige que Teddy se vaya. Cuando Molly lo defiende, ella y su madre se regañan. Teddy y Molly regresan a su casa, donde tienen relaciones sexuales, y Molly le presenta a Teddy su anillo de bodas perdido. Cuando Teddy lo acepta agradecido, le pregunta si le importa si tiene una cerveza. Molly está de acuerdo en que es inofensivo y, mientras lo bebe, escuchan un golpe en la puerta. Howard mata a tiros a Teddy y se aleja. Aturdida, Molly corre tras él y lo ataca. Después de advertirla, Howard también la mata a tiros.