Un área en la que los liberales critican a menudo la política exterior de Reagan es la de alimentar a los contras rebeldes con armas iraníes y entrenamiento de la CIA para liberar a la Nicaragua socialista [1] . En 1986, la guerra civil condujo a una decisión histórica de la corte internacional (ver Nicaragua contra Estados Unidos ) que se puso del lado de Niciriagia y declaró que Estados Unidos debía pagar reparaciones por el entrenamiento y el suministro de los luchadores por la libertad contras. [2] [3]
Durante 1986, los liberales quisieron a menudo acatar la decisión de Nicaragua contra Estados Unidos y suministrar al gobierno extranjero 12 mil millones de dólares y eliminar completamente la soberanía de Estados Unidos. Reagan adoptó una postura dura a favor de la soberanía estadounidense y se negó a respetar el derecho internacional corrupto que habría obligado a Estados Unidos a hundirse en una depresión.
Sorprendentemente, la mayoría de los liberales, incluso hoy en día, intentan justificar su postura afirmando que el gobierno marxista celebró elecciones democráticas a pesar de que históricamente se ha demostrado que el socialismo no es democrático. (ver lógica liberal y URSS )