Adelheid Maria Eichner (1762–1787) fue una compositora , cantante y pianista alemana que se destacó durante su breve vida por su excelente voz de canto de tres octavas y su técnica vocal. Fue hija única del fagotista y compositor Ernst Eichner y su esposa, María Magdalena Ritter. Los críticos afirman que sus composiciones son más efectivas instrumentalmente que vocalmente. Como compositora, Adelheid Eichner tuvo dificultades para combinar palabras y música de manera efectiva. [1]
Adelheid Eichner creció en Zweibrücken. Su padre, Ernst Eichner, trabajó en la Hofkapelle del duque Christian IV de Zweibrücken-Birkenfeld desde el otoño de 1762 hasta noviembre de 1772. Un anciano castrato italiano de una buena escuela le enseñó a cantar en Mannheim, mientras que se cree que su padre le enseñó el piano. A fines de 1773, ella y su madre se reunieron con su padre en Potsdam. Había viajado a París y Londres para dar conciertos y había comenzado a trabajar en la Hofkapelle del Príncipe de Prusia en agosto de 1773. [2]
A partir de 1773, Adelheid trabajó en la Hofkapelle, con su padre, como la única cantante alemana. Apareció en conciertos públicos en Berlín como 'Cammer Sängerin' del príncipe desde 1777 y desde 1781, en la Ópera Real de Berlín. Se convirtió en miembro permanente de la ópera desde 1782 y cantó papeles principales en representaciones de ópera seria .
Adelheid Eichner se destacó por primera vez como compositora en 1780, cuando se publicaron sus 12 Lieder mit Melodien fürs Clavier en Potsdam. Esta colección es su único trabajo sobreviviente e incluye una de las primeras canciones de Goethe , un escenario de Jägers Nachtlied . Aunque muy expresivas, las canciones están concebidas en términos instrumentales, con poca consideración por la melodía natural de sus textos. Más canciones individuales se imprimieron en almanaques musicales hasta 1792. Eichner compuso poemas de GA Bürger y JD Overbeck, así como los del general holandés von Stamford, quien desde aproximadamente 1775 hasta 1786 fue tutor en la corte del Príncipe de Prusia y según Zelter, estaba comprometido con ella. [2]
Eichner recibió considerables elogios por su técnica vocal en todo su rango de tres octavas. El Freiburg Musikalisches Taschenbuch de 1784 elogió su forma de tocar el piano y afirmó que tocaba "con la misma facilidad y habilidad [con la que canta] y particularmente con respecto a las cuestiones de gusto en la interpretación, el espíritu sensible de su padre parece descansar en ella". [2]
Como compositora, Adelheid Eichner recibió críticas por ponerle música a sus palabras. Los críticos argumentan que sus composiciones son más efectivas instrumentalmente que vocalmente. [1]