Cueva Ali-Sadr
La cueva de Ali-Sadr ( persa : غار علیصدر ), originalmente llamada Ali Saadr o Ali Sard (que significa frío), es la cueva de agua más grande del mundo que atrae a miles de visitantes cada año. [1] Se encuentra en el condado de Ali Sadr Kabudarahang, a unos 100 kilómetros al norte de Hamadan , en el oeste de Irán (más exactamente en 48°18'E 35°18'N). Por la proximidad de la cueva a grandes ciudades como Hamadan , es un destino muy recomendable para turistas de todos los rincones del mundo. Los recorridos por la cueva están disponibles en hidropedales.. La cueva de Ali-Sadr fue redescubierta por un pastor del pueblo de Ali-Sadr en el que se encuentra la cueva.
Ali-Sadr es la cueva de agua más grande del mundo, donde te sientas en un bote y contemplas la vista. Esta cueva está ubicada en 48°18'E 35°18'N, en la parte sur del pueblo de Ali Sadr . Se ingresa a la cueva por la ladera de una colina llamada Sari Ghiyeh , que también incluye otras dos cuevas llamadas Sarab y Soubashi , cada una a 7 y 11 kilómetros de la cueva Ali-Sadr. Aparentemente, el agua en la cueva de Ali-Sadr proviene de un manantial en Sarab.
En el verano de 2001, una expedición alemana / británica inspeccionó la cueva y descubrió que tenía 11 kilómetros de largo. [2] La cámara principal de la cueva mide 100 metros por 50 metros y 40 metros de alto.
Las paredes de la cueva pueden extenderse hasta 40 metros de altura y contiene varios lagos grandes y profundos . La cueva tiene un río que fluye a través de ella y la mayoría de los viajes a través del sistema de cuevas se realizan en bote. Hasta el momento se han descubierto más de 11 kilómetros de los canales de agua de la cueva. Algunas rutas tienen de 10 a 11 kilómetros de largo y todas conducen a "La Isla", un gran atrio ubicado en el centro.
Las excavaciones y los estudios arqueológicos de la cueva han llevado al descubrimiento de obras de arte antiguas, jarras y cántaros que datan de hace 12.000 años. [3] En las paredes y pasajes de la sección de salida se representan animales, escenas de caza y arcos y flechas. Estas imágenes sugieren que el hombre primitivo usó la cueva como su morada. La cueva fue conocida durante el reinado de Darío I (521-485 aC) lo que se puede comprobar por una antigua inscripción en la entrada del túnel. Sin embargo, el conocimiento de la existencia de la cueva se perdió y solo fue redescubierta en 1963 por montañeros iraníes. [1]
