Una arteria muscular (o arteria distribuidora ) es una arteria de tamaño mediano que extrae sangre de una arteria elástica y se ramifica en "vasos de resistencia", incluidas las arterias pequeñas y las arteriolas . Sus paredes contienen una mayor cantidad de músculos lisos, lo que les permite contraerse y expandirse según la demanda de sangre periférica. [1]
Esto contrasta con el mecanismo de las arterias elásticas, que usan sus propiedades elásticas para almacenar la energía generada por la contracción del corazón por un breve momento (retroceso elástico).
Bajo el microscopio, las arterias musculares pueden identificarse por su lámina elástica interna claramente definida . En vasos constreñidos, la lámina elástica de las arterias musculares aparece gruesa y torcida. La lámina elástica se visualiza mejor con la tinción de Verhoeff , pero se puede detectar fácilmente en muestras teñidas con otras técnicas como una región de tinción negativa bien definida.
Las arterias musculares, junto con las arterias elásticas, son sitios comunes para la aterosclerosis. [ cita requerida ]