Friedrich Engelhorn
Friedrich Engelhorn (17 de julio de 1821-11 de marzo de 1902) fue un industrial alemán y fundador de BASF en Ludwigshafen . [1]
Friedrich Engelhorn nació el 17 de julio de 1821 en Mannheim , donde su padre era maestro cervecero y dueño de un pub. A la edad de nueve años fue enviado a la escuela primaria local, pero dejó la escuela cuatro años más tarde y tomó un aprendizaje para convertirse en orfebre. Tras el tradicional viaje, que le llevó a Mainz, Frankfurt, Munich, Viena, Ginebra, Lyon y París, Engelhorn abrió en 1847 una orfebrería en su ciudad natal.
Como consecuencia de la revolución de 1848, su negocio comenzó a sufrir problemas económicos, razón por la cual Engelhorn estableció una fábrica de gas privada en Mannheim. Producía y vendía gas envasado, que se utilizaba para iluminar bares y talleres. Tres años después, Engelhorn se convirtió en inquilino de la planta pública de gas y comenzó a iluminar las calles de la ciudad con gas.
Al producir gas a partir del carbón, se dejaron grandes cantidades de alquitrán como subproducto. En 1856, William Perkin descubrió que el alquitrán se podía usar para hacer tintes sintéticos a partir de anilina. Engelhorn reconoció rápidamente las oportunidades que el descubrimiento de Perkin podría tener para su propio negocio y fundó una pequeña fábrica de anilina y colorantes, que estaba ubicada no muy lejos de la planta de gas de Mannheim. En 1861 comenzó a producir fucsina .
Cuatro años más tarde, Engelhorn quiso ampliar su participación en la industria química y con varios socios fundó “Badische Anilin- & Soda-Fabrik” (BASF) el 6 de abril de 1865. Pero los empresarios tuvieron problemas para encontrar una ubicación para su nueva empresa. Al principio querían comprar terreno en Mannheim, pero su oferta fracasó debido al ayuntamiento, que no estaba dispuesto a vender terrenos para la nueva fábrica. Al día siguiente de su decisión, Engelhorn, que se había convertido en director comercial de la corporación, fue a la vecina Ludwigshafen y compró un terreno allí.
La nueva empresa fue un gran éxito y pronto se convirtió en una importante empresa química. Dos años después de su fundación, BASF ya empleaba a más de 300 trabajadores. Solo necesitaron unos años, hasta que se dieron los primeros pasos hacia una empresa multinacional. En 1873 se estableció una oficina de ventas en Nueva York. Tres años más tarde se abrió un centro de producción en Butirki, cerca de Moscú, y en 1878 se adquirió una fábrica francesa en Neuville-sur-Saône.
