Georg Engelhard Schröder
Georg Engelhard Schröder (31 de mayo de 1684 - 17 de mayo de 1750), también escrito como George Engelhardt Schroeder , fue un pintor sueco.
El padre de Schroder, Veit Engelhard Schröder (fallecido en 1710), era un orfebre de la ciudad alemana de Núremberg . En 1670 Veit y su esposa Lucia Lindemeyer emigraron a Estocolmo, donde Georg nació catorce años después. En sus primeros años estudió con el pintor David von Krafft (1655-1724), y solo dejó su estudio en 1703 para viajar al extranjero. En los siguientes veintiún años, Schröder visitó la mayor parte de Europa. Comenzó con un tiempo en el norte de Alemania antes de mudarse a Italia, donde permaneció cinco años en Venecia , copiando a los viejos maestros, pintando vistas de la ciudad y entrando en contacto con la pastelista Rosalba Carriera (1675-1757).
Luego se mudó a Roma, donde se inspiró en artistas barrocos como Carlo Dolci (1616–1686), Carlo Maratta (1625–1713) y Francesco Trevisani (1656–1746). También utilizó un estilo de dibujo rápido y ligero, propio del arte italiano de la época. En París obtuvo un nuevo ímpetu e influencia del pintor Noël-Nicolas Coypel (1690-1734), antes de pasar siete años en Londres, donde recibió la influencia de los retratos de Godfrey Kneller (1646-1723) y Michael Dahl .
En diciembre de 1724, después de la muerte de David von Krafft, se ordenó a Schröder que regresara a Suecia para reemplazar a su antiguo maestro como retratista de la corte. Poco después, en 1727, Schröder se casó con Anna Birgitta Spöring. Federico I de Suecia valoraba mucho a Schroder, quien produjo varios retratos de Federico y su reina Ulrika Eleonora . Casi al mismo tiempo, realizó dos pinturas conocidas de embajadores del Imperio Otomano en la corte sueca: Mustapha Aga en 1727 y Yirmisekizzade Mehmed Said Efendi (más tarde Gran Visir del Imperio Otomano ) en 1733. [1]
En 1745, Schröder fue nombrado consejero de la corte y amasó una fortuna moderada con todos los encargos que obtuvo. En la década de 1740 , Gustaf Lundberg (1695-1786) trajo un nuevo estilo con influencia francesa a Suecia y la demanda de obras de Schroder disminuyó; esto significó que fue uno de los últimos pintores suecos del siglo XVIII cuya influencia predominante fue el arte italiano. Uno de sus alumnos más notables fue Alexander Roslin (1718-1793).
