J. Posadas


Homero Rómulo Cristalli Frasnelli (20 de enero de 1912-25 de mayo de 1981), más conocido con el seudónimo de J. Posadas o en ocasiones de Juan Posadas , fue un trotskista argentino cuya visión personal suele describirse como posadismo . Originalmente un seudónimo colectivo de la dirección del Grupo Cuarta Internacional en Argentina en la década de 1940, también fue utilizado inicialmente por Dante Minazzoli. [1]

Nacido en Argentina de inmigrantes italianos de la ciudad sureña de Matera , Cristalli creció en la pobreza intensa en Buenos Aires con al menos nueve hermanos. [1] Después de la muerte de su madre, él y sus hermanos y hermanas tuvieron que mendigar a los vecinos y hacer trabajos ocasionales por unos centavos para poder sobrevivir. La desnutrición lo dejó con problemas de salud permanentes, pero también influyó en su visión del capitalismo. [1]

Ganó fama jugando al fútbol para Estudiantes de La Plata en su juventud. En la década de 1930 trabajó como zapatero y organizó un sindicato de zapateros y trabajadores del cuero en Córdoba , Argentina.

Durante este período se presentó como candidato a las elecciones en la provincia de Buenos Aires por el Partido Socialista Obrero ( es ). Luego se unió al Partido de la Revolución Socialista, que se afilió a la Cuarta Internacional en 1941, pero el partido declinó rápidamente. En 1947, Cristalli y Dante Minazzoli fundaron el Grupo Cuarta Internacional (GCI) como un pequeño círculo de militantes de la clase trabajadora comprometidos con el trotskismo. [1]

Posadas se convirtió en el líder del Buró para América Latina de la Cuarta Internacional en la década de 1950 y, bajo su dirección, el movimiento ganó cierta influencia en la región, particularmente entre los trabajadores ferroviarios cubanos , los mineros de estaño bolivianos y los trabajadores agrícolas en Brasil .

Cuando la Cuarta Internacional se escindió en 1953, Posadas y sus seguidores se pusieron del lado de Michel Pablo y del Secretariado Internacional de la Cuarta Internacional . Para 1959, sin embargo, él y sus seguidores estaban peleando con la dirección del ISFI acusándolos de falta de confianza en la posibilidad de una revolución. También difirieron sobre el tema de la guerra nuclear con Posadas considerando que "Guerra-Revolución" "resolvería el hash del estalinismo y el capitalismo" y que la guerra nuclear era inevitable ya que una sociedad socialista resurgiría de las cenizas.


J. Posadas