Las Cartas de Kew (también conocidas como la Nota Circular de Kew ) fueron varias cartas, escritas por el estadista Guillermo V, Príncipe de Orange entre el 30 de enero y el 8 de febrero de 1795 desde la "Casa Holandesa" en el Palacio de Kew , donde permaneció temporalmente después de su viaje a Inglaterra el 18 de enero de 1795. Las cartas fueron escritas en su calidad de Capitán general de la República Holandesa a las autoridades civiles y militares de las provincias de Zelanda y Frisia.(que aún no había capitulado en ese momento), a los oficiales que comandaban los buques de guerra holandeses en los puertos británicos y a los gobernadores coloniales holandeses. Los instó a continuar la resistencia en cooperación con Gran Bretaña contra las fuerzas armadas de la República Francesa que habían invadido la República Holandesa y lo obligaron a huir a Inglaterra. En particular, las cartas a los gobernadores coloniales jugaron un papel importante, porque les ordenaron entregar esas colonias a los británicos.
Los gobernadores de Malaca , Amboina y Sumatra Occidental cumplieron sin luchar. Cochin se rindió después de un breve bombardeo. El resto de los enclaves holandeses en el sur de la India y la costa de Sri Lanka también fueron rápidamente capturados. En otros lugares, aunque los gobernadores no cumplieron con la orden de poner sus instalaciones militares a disposición de los británicos, muchos estaban confundidos y desmoralizados por las cartas.
En las Cartas de Oranienstein de 1801 , Guillermo V y su hijo sí reconocieron la República de Batavia y renunciaron a su estatolderado hereditario.
Referencias
Otras lecturas
- Israel, JI (1995), The Dutch Republic: Its Rise, Greatness and Fall, 1477-1806 , Oxford University Press , ISBN 0-19-873072-1 tapa dura, ISBN 0-19-820734-4 tapa blanda, p. 1127
- (en holandés)Woelderink, B. y Muij-Fleurke, HJ de (2005) Inventaris van de archieven van stadhouder Willem V (1745-1808) en de Hofcommissie van Willem IV en Willem V (1732-1794) , Uitgeverij Verloren, ISBN 90-6550-890-2 , pág. 102 (núm. 1007)