24 de mayo de 2008 violencia en Sucre


La violencia del 24 de mayo de 2008 en Sucre , Bolivia , consistió en enfrentamientos, toma de rehenes, agresiones y supuestas humillaciones públicas contra líderes rurales principalmente indígenas y sus partidarios. Los hechos surgieron a raíz de una visita anunciada del presidente boliviano, Evo Morales , durante la cual tenía previsto presidir la donación de ambulancias a municipios rurales de Chuquisaca , departamento del que Sucre es capital.

Previo a la visita prevista, el movimiento cívico liderado por el Comité Interinstitucional y el Comité Cívico de Chuquisaca exigió a Morales disculparse con las familias de tres sucreños que fueron asesinados en enfrentamientos de noviembre de 2007 frente a las reuniones finales de la Asamblea Constituyente de Bolivia . Estas organizaciones planearon protestas disruptivas de la visita de Morales. Sin embargo, bajo la presión de las protestas, Morales decidió el 24 de mayo no asistir a la presentación.

Los participantes en las protestas del movimiento cívico luego se enfrentaron en las calles con los campesinos que llegaron a Sucre para contrarrestar a los manifestantes locales. Durante la tarde, varias decenas de campesinos indígenas fueron marchados por manifestantes del movimiento cívico a la plaza central de Sucre, la Plaza 25 de Mayo. Allí fueron golpeados, amenazados, obligados a quitarse la camisa y arrodillarse, sometidos a supuestos insultos racistas y supuestamente humillados públicamente de diversas formas.

El incidente aumentó las tensiones políticas y raciales en Bolivia, entonces en medio de un conflicto político entre Morales y el grupo de gobernadores CONALDE. En el segundo aniversario de la violencia, el 24 de mayo de 2010, se presentó el primer borrador público de la Ley contra el Racismo de Bolivia . En mayo de 2011, la Ley 139 de Bolivia estableció el 24 de mayo como el Día Nacional de Bolivia contra el Racismo y Toda Forma de Discriminación. [1]

Un gran número de funcionarios del Comité Interinstitucional y del gobierno municipal de Sucre fueron procesados ​​por conspirar en la violencia de abril y mayo de 2010. [2] El expresidente del Comité Interinstitucional Jaime Barrón , quien recientemente había sido elegido alcalde, fue suspendido por el Concejo Municipal y luego renunció a raíz de las acusaciones. [3] Sin embargo, los juicios avanzaron lentamente. Un juicio inicial, celebrado en Sucre, se disolvió en agosto de 2012 después de que dos de los jueces presidentes renunciaran al caso. [4] Luego se llevó a cabo un segundo juicio en el pueblo de Padilla.

El juicio de catorce personas acusadas de orquestar o participar en la violencia del 24 de mayo terminó en marzo de 2016. El fiscal Lisandro Álvarez pidió sentencias de 15 años para los acusados ​​y las víctimas pidieron 30 años. [5] Los veredictos y sentencias emitidos por el juez Hoffman Padilla Blacutt fueron los que se muestran a continuación. [6] [7] Todas las sentencias se descontarán por el tiempo ya cumplido en la cárcel. El 11 de noviembre de 2016, el Tribunal Departamental de Justicia resolvió un recurso de apelación de los procesados, ampliando estas penas en 10 de los 13 casos. [8]