Mense maio


Mense maio es una encíclica del Papa Pablo VI promulgada el 29 de abril de 1965, que se centró en la Virgen María, a quien tradicionalmente se dedica el mes de mayo como Madre de Dios. Pablo VI escribe que María debe ser considerada con razón como el camino por el cual las personas son conducidas a Cristo. Por tanto, la persona que se encuentra con María no puede evitar encontrar a Cristo. [1]