Los correlatos osteológicos son marcas en los huesos de los animales que se forman a partir de las interacciones causales de los tejidos blandos y el hueso subyacente. Los correlatos osteológicos más clásicos en la anatomía animal son las cicatrices musculares y los procesos óseos que se observan en los huesos de los animales. Estas estructuras son causadas por la tracción de los músculos en el hueso subyacente. Este tirón ejerce presión sobre el hueso subyacente, estimulando la formación de hueso más grueso en estas regiones y produciendo las estructuras subyacentes.
Referencias
