Pippo (o Pibo ) fue el obispo de Toul entre 1070 y 1107. Era un sajón , relacionado a través de su familia con la corte imperial. Fue canciller de Enrique IV, emperador del Sacro Imperio Romano Germánico , en 1068. [1]
Pippo fue acusado de simonía, acusación que llevó al Papa Gregorio VII a investigar a través de Udo, arzobispo de Trier , y Hermann, obispo de Metz . [2] Fue respaldado por Enrique IV y finalmente mantuvo su puesto.
Pippo asistió al Sínodo de Worms en 1076 y firmó el documento donde renunciaba a su obediencia a Roma. También presente en Utrecht ese mismo año, huyó a última hora para evitar presenciar la excomunión del Papa Gregorio VII por parte del obispo Guillermo de Utrecht . Estuvo presente en la dieta de Tribur (octubre de 1076), donde fue reconciliado con la iglesia por el legado, el obispo Altmann de Passau . [1]
Después de la muerte de Gregorio VII en 1085, Pippo realizó una peregrinación a Tierra Santa . Estuvo ausente hasta 1087, cuando se retiró al monasterio de San Benignus de Dijon . [3] El Papa Urbano II exigió que regresara a su oficina episcopal, una orden que aceptó. Al parecer, trató de imponer al clero algunas reglas, como prohibir la aceptación de los hijos de los sacerdotes en las órdenes sagradas .
Murió el 25 de noviembre de 1107. [1]
Referencias
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