En respuesta a la Década de las Naciones Unidas de la Educación para el Desarrollo Sostenible (DESD, 2005-2014), la Universidad de las Naciones Unidas (UNU) llamó al desarrollo de redes regionales para la promoción de la Educación para el Desarrollo Sostenible (EDS). Estas redes abordan los desafíos del desarrollo sostenible local a través de la investigación y el desarrollo de capacidades. Este fue el nacimiento de los Centros Regionales de Experiencia en EDS (RCEs). Los RCE son reconocidos por la UNU en base a las recomendaciones del Comité de Pares de Ubuntu para los RCE, que consta de signatarios de la Declaración de Ubuntu firmada en 2002.
Los RCE aspiran a lograr las metas del DESD traduciendo sus objetivos globales al contexto de las comunidades locales en las que operan. Esto luego se logra actuando como un catalizador para las instituciones que promueven la EDS a través de la educación formal, no formal e informal, y brindando plataformas adecuadas para compartir información y experiencias y promover el diálogo entre los actores regionales a través de alianzas para el desarrollo sostenible. También desarrollan bases de conocimientos regionales para apoyar la EDS y promover sus objetivos de una manera eficaz en cuanto a los recursos. Esto puede lograrse mediante la ejecución de programas de capacitación, facilitando la investigación sobre la EDS, mediante la sensibilización del público y aumentando la calidad y el acceso a la EDS en la región. [1]
Los RCE no solo son significativos para la región en sí, donde brindan una oportunidad única para promover el aprendizaje y el desarrollo para el SD, sino también a nivel internacional, donde ayudan a constituir el Espacio Global de Aprendizaje para el Desarrollo Sostenible. A nivel mundial, los RCE se facilitan a través del Instituto de Estudios Avanzados de la Universidad de las Naciones Unidas (UNU-IAS), que proporciona un marco para la estrategia, las mejores prácticas y las técnicas para el éxito, que luego se pueden traducir al nivel regional.
RCE recientemente [ ¿cuándo? ] ha sido reconocido en la Declaración de Bonn de 2009, que llama a la acción para “desarrollar conocimientos a través de redes de EDS” a través de “redes que podrían servir como centros de experiencia e innovación”. [2]