El pícaro


The Rogue es un cortometraje de comedia mudaestadounidense de 1918(26 minutos) con Billy West y Oliver Hardy producido por King Bee Comedies .

El personaje principal es una copia al carbón de Vagabundo de Charlie Chaplin hasta los detalles de los zapatos doblados, el bastón delgado y el sombrero a juego. Además, el dueño del café interpretado por Hardy está claramente inspirado en Eric Campbell . [1]

Una figura vagabunda seca platos en una cocina con un delantal de mujer. Deja caer un plato y se rompe. Hace más ruido tratando de arreglar su desorden. La dueña de la casa y su criada escuchan el alboroto y van a investigar. La dama se llena de polvo cuando abre la puerta. Se quita el delantal y va al salón para servirse el té de ella porque tiene hambre. Ella lo atrapa y lo envía de regreso a la cocina.

Se va y va a un café donde el gerente (Hardy) está tratando de equilibrar la caja. Un cliente cercano a la caja va al baño. El vagabundo se aprovecha y comienza a comer su carne. El nan regresa y es ofendido. Llama al gerente y el gerente toma al vagabundo por el cuello y lo sacude. El vagabundo empuja un pastel en la cara del gerente y se va. El gerente usa el mantel para limpiarse la cara.

El vagabundo va a un parque y se sienta en un banco debajo de un sauce junto a un estanque. Una pareja se sienta a su lado. Se sirve su bolsa de bocadillos. El hombre, un poco tonto, se enoja. Llega un policía y el vagabundo lo empuja al estanque. La pareja se sube a un bote de remos. El toff se inclina para desatar el barco de su amarre. Es demasiado tentador para el vagabundo y patea el trasero del toff, lanzándolo al estanque. Cada vez que reaparece, el vagabundo lo empuja hacia abajo. El vagabundo se aleja contoneándose y la chica ayuda al imbécil a salir.

La niña deja el toff y se sube a la parte trasera de un coche con chófer. Pasan por encima del vagabundo y ella sale para ver si está bien. El vagabundo finge ser peor de lo que es y es metido en la parte trasera del coche. Lo llevan a una gran mansión donde el chofer lo lleva al salón y lo coloca en un sillón. El padre de la niña, entra el conde, y apuntala al vagabundo con cojines. Le sirve un gran brandy que la chica le lleva a los labios. Se desliza de la silla mientras bebe. La niña le ofrece un cigarrillo de un gran cofre de plata y el conde pone más cojines detrás de él.