Los formatos alternativos incluyen audio , braille , versiones electrónicas o en letra grande de la impresión estándar, como material educativo, libros de texto, folletos de información e incluso las facturas y cartas personales de las personas. Se crean formatos alternativos para ayudar a las personas ciegas o con discapacidad visual a obtener una evaluación de su información personal y de ocio, ya sea visualmente (letra grande), de oído (audio) o táctil (braille).
Audio
La información de audio es beneficiosa para muchas personas y puede ser utilizada por cualquiera que tenga un reproductor de CD, un reproductor DAISY o una computadora. El audio permite a las personas ciegas o con deficiencias visuales acceder a la información a través del oído, en el sentido en que la entenderían los lectores impresos.
Elegir audio
Es probable que diferentes personas tengan sus propias preferencias sobre la forma en que acceden al audio, según sus experiencias, qué tan cómodos se sientan con la tecnología y el equipo con el que acceden al contenido de audio.
CD como medio para acceder a la información
Los discos compactos (CD) se produjeron por primera vez en la década de 1980 para almacenar y reproducir grabaciones de sonido exclusivamente, y se volvieron superiores a las cintas de casete (AC) que ofrecen un mejor sonido y tamaño. Los CD estándar tienen un diámetro de 120 milímetros (4,7 pulgadas) y pueden almacenar hasta 80 minutos de audio sin comprimir (o 700 megabytes de datos). Los CD ofrecen cierta navegación desde el principio de una pista a otra, en lugar de tener que avanzar o retroceder y adivinar dónde empezaron y terminaron las pistas.
Con el tiempo, los CD han pasado de ser únicamente para música a ser un formato para todo tipo de almacenamiento de datos, como texto, imágenes, fotos y videos. Los educadores pueden usar CD para almacenar materiales educativos, incluidas conferencias grabadas, presentaciones y folletos en un disco compacto para que el estudiante pueda acceder a ellos en reproductores de CD o computadoras.
Braille
Braille es un sistema táctil de puntos en relieve que permite a las personas ciegas o con deficiencias visuales acceder a la información mediante el tacto. El patrón de puntos en relieve se organiza en celdas de hasta seis puntos, creando un total de 63 combinaciones diferentes posibles. Cada celda representa una letra del alfabeto, un número o un signo de puntuación. Algunas palabras y combinaciones de letras de uso frecuente también tienen sus propios patrones de celda única.
El braille puede ser la piedra angular de las habilidades lingüísticas y una forma de enseñar ortografía, gramática y puntuación a personas con pérdida de visión o sordociegas. Los códigos Braille no solo representan alfabetos, también denotan números, símbolos, música y notaciones matemáticas, lo que permite a las personas aprender sobre diferentes temas de una manera diferente a la mayoría de nosotros. Los libros en braille están disponibles en todas las áreas temáticas, desde la ficción moderna hasta las matemáticas, la música y el derecho. Al igual que con el texto impreso, el Braille permite que las personas accedan a la información en este formato.
Electrónico (texto electrónico)
Para muchos de nosotros, tener acceso a equipos informáticos y software adecuado hace que la información escrita sea accesible. La tecnología actual permite que las personas realicen la mayor parte de su investigación en línea, compartan documentos por correo electrónico y descarguen notas de conferencias de los sitios web de las escuelas. Con el texto escrito convertido a un formato legible en la computadora, se puede acceder a él visualmente con un software de aumento de pantalla o por medios auditivos con tecnología de conversión de texto a voz.
Letra grande
La letra grande es esencial para las personas que tienen dificultades visuales o de aprendizaje y tienen problemas para leer la letra pequeña o descifrar el texto abarrotado al mismo tiempo. La letra grande suele oscilar entre 16 y 22 puntos, mientras que la letra grande utiliza fuentes de más de 24 puntos.
Tener un solo tamaño no satisfará las necesidades de todos; por lo tanto, es importante averiguar cuál es un tamaño de lectura cómodo para cada individuo. La investigación ha demostrado los impactos positivos de proporcionar un tamaño de fuente ampliado para personas con deficiencias visuales leves a moderadas, lo que resulta en una mayor fluidez y velocidad de lectura.