Antonio (fallecido en 302 d.C.) fue uno de los primeros sacerdotes cristianos que sufrió el martirio con Anastasio , Julián , Celso y Marcionilla durante la persecución de Diocleciano . [1] Denunciando la forma de vida romana , vivió como un ermitaño en el desierto , practicó el celibato, vivió de raíces y plantas, y evitó las visitas que recibía. Antonio deseaba vivir su vida en completa solidaridad con Dios .