Fruela (o Froila ) fue brevemente rey de Asturias en 866 tras usurpar el trono a Alfonso III .
Con anterioridad a la toma del trono, Fruela era conde en o de Galicia . Allí presidió una audiencia judicial en Lugo el 5 de junio de 861. [1] La audiencia tuvo lugar "en presencia del señor conde Fruela [y éste] la adjudicó". [2] Más tarde se metió en una disputa legal sobre la villa de Carcacía con la diócesis de Iria Flavia . Después de asumir el poder, confiscó las tierras en cuestión. [1] [3] [4]
A la muerte de Ordoño I , el 27 de mayo de 866, le sucede su hijo Alfonso, de catorce o dieciocho años. Una carta emitida por Alfonso el 18 de junio de 866 da fe de su sucesión. Algún tiempo después de esa fecha, Fruela se hizo con el trono y obligó a Alfonso a exiliarse en Castilla o Álava . A los pocos meses, el usurpador había sido asesinado en Oviedo . La restauración de Alfonso se había producido el 20 de enero de 867, cuando devolvió a Iria Flavia las tierras que Fruela había confiscado. [1] Esta carta fue confirmada por el conde Rodrigo de Castilla , quien evidentemente había regresado con Alfonso a Oviedo. [3] Es posible que haya tenido un papel en la derrota de Fruela. [5]
La usurpación de Fruela no consta en la Crónica de Alfonso III , recopilación histórica ordenada por Alfonso III hacia el final de su reinado, [1] aunque el fuero de Alfonso de enero de 867 hace referencia indirecta a ella: "la villa de Carcacía, que [pertenecía] por razón a la iglesia de Iria y a la de Santa Eulalia, que se apoderó el desdichado Fruela". [6] Se menciona en la obra de Sampiro , escrito a principios del siglo XI, y de Sampiro se incorporó a la Historia Silense del siglo XII . Sin embargo, el relato más completo y más antiguo se encuentra en la Crónica de Albelda . Esto fue escrito alrededor de 881: [7]
Alfonso, hijo de Ordoño, asumió la realeza a los dieciocho años. En la primera flor de su adolescencia —en el primer año de su reinado y el decimoctavo desde su nacimiento— fue privado de su gobierno a consecuencia de una rebelión del apóstata conde de Galicia, Fruela. El rey partió para Castilla. Después de poco tiempo, este mismo rey rebelde y desdichado, Fruela, fue muerto por los fieles de nuestro príncipe en Oviedo, y el glorioso joven fue traído de Castilla. [8]
Sampiro (y la Historia Silense ) le da a Fruela el apellido patronímico "Jemúndez", lo que implica que tenía un padre llamado Jemundo. [9] "Jemúndez" puede ser, sin embargo, un error de Vermúdez, que significa hijo de Vermudo. [4] [10] El nombre de pila Fruela fue utilizado por la dinastía gobernante de Asturias , lo que sugiere que Fruela pudo haber sido un pariente real lejano. [1] Sampiro también se refiere a Fruela como un " hijo de perdición ", una referencia a Judas Iscariote :