Sin permiso, sin amor | |
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Dirigido por | Charles Martin |
Escrito por | Laszio Kardos Charles Martin |
Producido por | Joe Pasternak |
Protagonizada | Van Johnson Keenan Wynn Pat Kirkwood |
Cinematografía | Harold Rosson Robert Surtees |
Editado por | Conrad A. Nervig |
DISTRIBUIDO por | Metro Goldwyn Mayer |
Fecha de lanzamiento | 3 de octubre de 1946 |
Tiempo de ejecución | 119 minutos |
País | Estados Unidos |
Idioma | inglés |
Presupuesto | $ 1,778,000 [1] |
Taquillas | $ 3,785,000 [1] |
No Leave, No Love es una película musical estadounidense de 1946dirigida por Charles Martin y protagonizada por Van Johnson , Keenan Wynn y Pat Kirkwood . [2] [3]
La historia trata sobre Mike, un infante de marina y ganador de la Medalla de Honor del Congreso , que regresa con su amigo Slinky de luchar en el Pacífico durante la Segunda Guerra Mundial.. Mike espera casarse con la novia de su ciudad natal; su madre quiere decirle en persona que se ha casado con otra persona. La mayor parte de la película involucra los esfuerzos de Susan, una popular personalidad de la radio, para evitar que se entere o se vaya a casa hasta que su madre llegue a Nueva York desde Indiana. Susan y Mike se enamoran; sobrevienen malentendidos. Las travesuras del increíblemente desagradable y ladrón Slinky completan la acción, y el elemento musical lo proporcionan varias apariciones de artistas entonces famosos en clubes nocturnos y en el programa de radio de Susan. La historia está respaldada por la llegada de Mike a la sala de espera de una sala de maternidad y el nacimiento de su hijo y el de Susan. Slinky tiene la última palabra cuando Rosalind anuncia que está embarazada.
La película ganó $ 2,891,000 en los EE. UU. Y Canadá y $ 894,000 en otros lugares, lo que resultó en una ganancia de $ 629,000. [1] [4]
Bosley Crowther de The New York Times escribe en su reseña: " No Leave, No Love comienza a divagar sobre el segundo carrete, cuando Van Johnson, como el héroe marino, le entrega las cosas a su amigo, Keenan Wynn. Y a partir de ahí Es principalmente una cuestión de cuán cómico puede ser el Sr. Wynn con un material poco más útil que su sentido del humor y un gran cigarro. Debe decirse en favor del Sr. Wynn, y tal vez en el crédito de su director, que sí sacar algunos negocios bastante divertidos en una vena estrictamente de comedia baja, pero todo es bastante forzado y caprichoso. Y también tiene sus puntos de saturación. [5]