Paradoja de la mera adición


La paradoja de la mera adición , también conocida como la conclusión repugnante , es un problema de ética , identificado por Derek Parfit y discutido en su libro Reasons and Persons (1984). La paradoja identifica la incompatibilidad mutua de cuatro afirmaciones intuitivamente convincentes sobre el valor relativo de las poblaciones. La formulación original de Parfit de la conclusión repugnante es que, "Para cualquier población perfectamente igual con un bienestar positivo muy alto, hay una población con un bienestar positivo muy bajo que es mejor, en igualdad de condiciones". [1]

Considere las cuatro poblaciones representadas en el siguiente diagrama: A, A +, B− y B. Cada barra representa un grupo distinto de personas. El ancho de la barra representa el tamaño del grupo, mientras que la altura de la barra representa la felicidad del grupo . A diferencia de A y B, A + y B− son poblaciones complejas, cada una de las cuales comprende dos grupos distintos de personas. También se estipula que la vida de los miembros de cada grupo es lo suficientemente buena como para que sea mejor para ellos estar vivos que no existir.

Juntas, estas tres comparaciones implican que B es mejor que A. Sin embargo, Parfit también observa lo siguiente:

Por tanto, existe una paradoja. Las siguientes afirmaciones intuitivamente plausibles son conjuntamente incompatibles: (1) que A + no es peor que A, (2) que B− es mejor que A +, (3) que B− es tan bueno como B, y (4) que B puede ser peor que A.

Algunos académicos, como Larry Temkin y Stuart Rachels, argumentan que las inconsistencias entre las cuatro afirmaciones (arriba) se basan en el supuesto de que la relación "mejor que" es transitiva . Podemos resolver la inconsistencia, por lo tanto, rechazando la suposición. Desde este punto de vista, del hecho de que A + no es peor que A y que B− es mejor que A +, simplemente no se sigue que B− sea mejor que A.

Torbjörn Tännsjö sostiene que la intuición de que B es peor que A es incorrecta. Si bien las vidas de los que están en B son peores que las de A, hay más y, por lo tanto, el valor colectivo de B es mayor que A. [2] Michael Huemer también argumenta que la conclusión repugnante no es repugnante y que la intuición normal es incorrecto. [3]