Esclerofila
La esclerofila es un tipo de vegetación que tiene hojas duras , entrenudos cortos (la distancia entre las hojas a lo largo del tallo) y orientación de las hojas paralelas u oblicuas a la luz solar directa que se adaptan a los largos períodos de sequedad y calor que presentan algunos tipos de vegetación. La palabra proviene del griego sklēros (duro) y phyllon (hoja). El término fue acuñado por AFW Schimper en 1898 (traducido en 1903), originalmente como sinónimo de xeromorfo , pero luego fue cambiado. [1]
Las plantas esclerófilas se encuentran en muchas partes del mundo, [2] pero son más típicas de áreas con escasas precipitaciones o sequías estacionales como Australia, África o el oeste de América del Norte y del Sur. Son prominentes en Australia , partes de Argentina , la región biogeográfica del Cerrado de Bolivia , Paraguay y Brasil , y en los biomas mediterráneos que cubren la Cuenca del Mediterráneo , California , Chile y la Provincia del Cabo de Sudáfrica .
En la cuenca mediterránea , la encina , el alcornoque y el olivo son árboles típicos de frondosas. Además, hay varias especies de pinos debajo de los árboles en la zona de vegetación. La capa de arbustos contiene numerosas hierbas como romero , tomillo y lavanda . En relación con la vegetación natural potencial, alrededor del 2% de la superficie terrestre de la tierra son áreas esclerófilas y un total del 10% de todas las especies de plantas de la tierra viven allí.
Las plantas leñosas esclerófilas se caracterizan por sus hojas relativamente pequeñas, rígidas, coriáceas y duraderas. La vegetación esclerófila es el resultado de una adaptación de la flora al período estival seco del clima mediterráneo .
Las especies vegetales con este tipo de adaptación tienden a ser siempre verdes con gran longevidad, crecimiento lento y sin pérdida de hojas durante la temporada desfavorable. Tenga en cuenta que "esclerofila" y "perenne" no son sinónimos. Como resultado, los matorrales que componen estos ecosistemas son del tipo perennifolio persistente, además del predominio de plantas, incluso herbáceas , con hojas "duras", las cuales están cubiertas por una gruesa capa coriácea denominada cutícula , que previene pérdida de agua durante la estación seca. Las estructuras aéreas y subterráneas de estas plantas se modifican para compensar la escasez de agua que puede afectar su supervivencia.
El nombre esclerofila deriva del esclerénquima altamente desarrollado de la planta, que es responsable de la dureza o rigidez de las hojas. Esta estructura de las hojas inhibe la transpiración y evita así pérdidas importantes de agua durante la estación seca. La mayoría de las especies de plantas en la zona de la esclerofila no solo son insensibles a la sequía del verano, sino que también han utilizado diversas estrategias para adaptarse a los frecuentes incendios forestales , las fuertes lluvias y las deficiencias de nutrientes . [3]
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