Stop Violence Against Women es una campaña mundial de Amnistía Internacional para contrarrestar la violencia contra las mujeres .
Se inició el 5 de marzo de 2004, en preparación antes del Día Internacional de la Mujer . Es una de las campañas clave de Amnistía. Amnistía considera que la violencia doméstica y sexual son violaciones graves de los derechos humanos y Amnistía debería afrontarlas. La campaña se centra en poner fin a la impunidad de quienes cometen ese tipo de violencia, presionando a los gobiernos para que procesen a las personas y modifiquen las leyes para proteger a las mujeres. Amnistía está particularmente preocupada por la incidencia de violaciones y otros actos de violencia cometidos en conflictos como la Segunda Guerra del Congo y el conflicto de Darfur .