Tuber anniae es una especie de trufa del género Tuber . [1] Se supone que la trufa es poco común, pero se encuentra principalmente en el noroeste del Pacífico de los Estados Unidos . [1] Recientemente se ha encontrado la fructificación de taxones estrechamente relacionados en los países del borde báltico , principalmente bosques dominados por pino silvestre en el este de Finlandia . [1]
Ecológicamente, las especies de Tuber son hongos ectomicorrícicos obligados y forman ectomicorrizas (ECM) con pino ( Pinus spp.), abeto ( Abies spp.), abedul ( Betula spp.), álamo temblón ( Populus spp.), roble ( Quercus spp.), avellano ( Corylus avellana L.), y jara ( Cistus spp.). [1] Sin embargo, la investigación de la trufa es un proceso bastante nuevo en el país boreal de Finlandia. [1] Originalmente solo había tres especies registradas de trufas blancas: Tuber borchii Vittad., T. maculatum y Tuber scruposum R. Hesse.[1] Sin embargo, la diversidad de Tuber en los bosques boreales o subboreales se está volviendo más evidente con la aplicación de herramientas moleculares a los estudios de comunidades ectomicorrícicas en estas regiones. [1] Las especies dentro del complejo T. anniae parecen estar adaptadas a una amplia gama de tipos de suelo, sin embargo, un complejo de especies puede tener numerosas especies individuales ( crípticas ), cada una de las cuales puede tener distintas preferencias ecológicas. [1] Las ectomicorrizas consisten en un manto que cubre la punta de la raíz y una red Hartig de hifas que rodean las células de la planta dentro de la corteza de la raíz.
El ascomata (cuerpo fructífero) es una característica única de T. anniae . La forma es subglobosa (no completamente redonda o esférica) a irregular, con un diámetro de entre 6 y 18 milímetros (0,24 y 0,71 pulgadas). [2] En la juventud tiende a ser glabro (sin pelo) con un color amarillo pálido y cuando madura un color marrón oliva oscuro con surcos y parches de color blanco grisáceo. [2] El olor del cuerpo es suave, similar al de la pintura; el sabor aún no se ha registrado. [2] No hay informes sobre la comestibilidad de T. anniae o sus parientes. Sin embargo, su relación con T. puberulum y T. borchii(dos especies de trufas comestibles) y su tamaño regular (en algunas colecciones) indican un valor culinario potencial, aunque aún es necesario determinar los rendimientos potenciales de estas trufas. [1]