Los contactados son personas que afirman haber experimentado contacto con extraterrestres . Algunos afirmaron tener encuentros en curso, mientras que otros afirmaron haber tenido tan solo un encuentro. La evidencia es anecdótica en todos los casos.
Como fenómeno cultural, los contactados quizás tuvieron su mayor notoriedad desde finales de la década de 1940 hasta finales de la década de 1950, pero las personas continúan haciendo afirmaciones similares en el presente. Algunos han compartido sus mensajes con pequeños grupos de seguidores, y muchos contactados han escrito libros, publicado artículos en revistas y periódicos, publicado boletines o hablado en convenciones de ovnis .
El movimiento de contactados ha visto una seria atención por parte de académicos y estudiosos de la corriente principal. Entre los primeros se encuentra el estudio clásico de 1956, When Prophecy Fails de Leon Festinger , Henry Riecken y Stanley Schachter , que analizó el fenómeno. Ha habido al menos dos antologías de nivel universitario de artículos científicos sobre los movimientos de los contactados.
Los relatos de contactados son generalmente diferentes de aquellos que alegan abducción extraterrestre , en que mientras los contactados generalmente describen experiencias positivas que involucran a extraterrestres humanoides , los abducidos rara vez describen sus experiencias de manera positiva.
la visita a la tierra de seres generalmente benignos cuyo propósito ostensible es comunicar (generalmente a unas pocas personas seleccionadas y favorecidas) mensajes de "importancia cósmica". Estos destinatarios elegidos generalmente tienen experiencias de contacto repetidas, que involucran mensajes adicionales [1]
Los contactados se convirtieron en un fenómeno cultural en la década de 1940 y continuaron durante las décadas de 1950 y 1960, a menudo dando conferencias y escribiendo libros sobre su experiencia. El fenómeno todavía existe hoy. Los escépticos a menudo sostienen que tales "contactados" están engañados o son deshonestos en sus afirmaciones. Susan Clancy escribió que tales afirmaciones son "recuerdos falsos" inventados a partir de una "mezcla de propensión a la fantasía, distorsión de la memoria, guiones culturalmente disponibles, alucinaciones del sueño y analfabetismo científico". [2]