Uga Vala


Uga era un jefe de Vala de Talaja en la región de Saurashtra del moderno estado de Gujarat en la India. Gobernó la región a finales del siglo X. Es el héroe popular popular de la poesía bardo de la región. [1] [2]

Uga Vala era un tío materno de Ra Kavat , el gobernante Chudasama de Saurashtra. La hermana de Uga Vala estaba casada con el padre de Kavat, Graharipu . En una ocasión, cuando todos los guerreros estaban relatando sus logros ante Kavat, todos ensalzaron tanto a Uga Vala que el Ra se puso celoso y le dijo a Uga Vala que era un buen guerrero cuando lo ayudaba Vanthali, pero que por lo demás no tenía mucha importancia. Vala Uga, sin embargo, se jactó de que podía arreglárselas sin la ayuda de Vanthali, la capital de Chudasama, y ​​dijo metafóricamente que podía aplaudir con una palma, es decir, sin la ayuda del Ra. Luego salió de la corte enojado y regresó a Talaja. [2]

Viramdeva Parmar, [A] el jefe que tenía la isla Shiyal, que es una de un grupo de tres islas frente a la costa de Saurashtra, cerca de Jafrabad . Se dice que se las ingenió para capturar a muchos Rajas con sus estratagemas y los confinó allí en una jaula de madera. Por fin, capturó a los jefes de las treinta y seis razas, excepto a los Yadava, en su isla. Como deseaba capturar a Kavat, que era Yadava, lo persuadió de que lo visitara a bordo de su barco que estaba anclado cerca de Prabhas Patan y allí lo capturó traicioneramente, y navegando con él a la isla Shiyal lo confinó allí con el otro. jefes en la jaula de madera. [1] [2] [3]

Kavat, ahora en prisión, envió el siguiente mensaje a Uga Vala por medio de un juglar errante (un bardo) que había pasado por su prisión: [2]

Dolor en su corazón y una herida en su cabeza; Dile a Uga Vala: Kavat está en la jaula de madera; Dijiste que cuando surgió la ocasión, tú, Uga, el señor Vala de Talaja, podrías aplaudir con una palma. [B]

Para que el cuervo no se siente en la rama;
Si no puedes aplaudir con una palma,
entonces aplaude, O Uga, con ambas palmas.
Los días pasan con dificultad,
y una hora parece un mes,
esperándote, el Vala,