CJ Bulliet


Bulliet creció en Corydon, Indiana y se graduó en 1904 de la Universidad de Indiana en Bloomington . Durante nueve años siguió una carrera de periodismo en la ciudad de Indianápolis . Cuando Robert Mantell, director de una compañía de teatro itinerante de Shakespeare , confesó que le gustaban las críticas teatrales de Bulliet, Bulliet se ofreció a convertirse en su agente de prensa. Bulliet viajó con antelación a la empresa a lo largo de los Estados Unidos y Canadá durante un período de nueve años, a excepción de un año, cuando él era un "regional hombre de avanzada " (publicista) de DW Griffith 's película muda El nacimiento de una nación (1915). Después de un breve regreso al periodismo periodístico en Louisville, Kentucky , Bulliet se mudó a Chicago para editar Magazine of the Art World , un periódico semanal publicado por el Chicago Evening Post . La crítica de arte siguió siendo su principal ocupación incluso después de que el Chicago Daily News asimilara el Post en 1932.

Bulliet jugó un papel central en la popularización del arte moderno en el medio oeste de los Estados Unidos y en la organización de los artistas independientes de Chicago, quienes se sintieron rechazados por los gustos conservadores que dominaban el Instituto de Arte de Chicago .

Su primer libro, Romance de Robert Mantell , se publicó en 1918. Sus manzanas y madonas (1927) ganó gran popularidad como introducción al arte moderno . Venus Castina (1928) fue un trabajo pionero sobre la personificación femenina . La cortesana Olympia exploró las relaciones entre los modelos y las amantes de los artistas . Su obra más popular fue Art Masterpieces of the 1933 Worlds Fair exhibida en el Art Institute of Chicago (1934). Su último libro publicado fue The Significant Moderns and Their Pictures (1936).

Estaba casado con la artista del sur de Indiana, Katherine Adams Bulliet; tuvieron un hijo, Leander Jackson. Después de la muerte de su primera esposa en 1947, se casó con Catherine Girdler Bulliet. CJ Bulliet es el abuelo del historiador Richard Bulliet . Durante un tiempo, su amante fue la pintora Macena Barton , [1] quien una vez desafió su afirmación de que ninguna mujer había pintado jamás un desnudo que valiera la pena. [2]