Tribunal de Cuentas (España)


El Tribunal de Cuentas ( en español : Tribunal de Cuentas ) es el órgano contable supremo del Gobierno de España responsable del control de las cuentas públicas y de la auditoría de la contabilidad de los partidos políticos, de conformidad con la Constitución y su Ley Orgánica .

El Tribunal de Cuentas está compuesto por el Presidente y 12 consejeros. Los Consejeros son designados por las Cortes Generales , seis de ellos por el Congreso y los otros seis por el Senado . Para ser nombrado Consejero del Tribunal se requiere ser persona con conocimientos en auditoría, juez, fiscal, docente universitario o servidor público en un oficio que requiera estudios superiores, abogado, economista o profesor de oficio, todos ellos con reconocida experiencia. y con quince años de actividad profesional. Los Consejeros de Cuenta del Tribunal son independientes e inamovibles. Su plazo es de 9 años. [3]

Los primeros orígenes de la Corte se remontan al Reinado de Juan II de Castilla . Álvaro de Luna , Condestable de Castilla , cuando se aconsejó al Rey que aprobara una real orden para simplificar la recaudación de impuestos debido a las dificultades en la recaudación de los tributos y en el ordenamiento de las cuentas. Esta real orden fue aprobada el 2 de julio de 1437 y regulaba a los Contadores Mayores, grupo de funcionarios encargados de resolver los conflictos económicos y recuperar el dinero no pagado a tiempo.

Durante el reinado de Isabel y Fernando , se concedieron nuevas ordenanzas el 9 de enero de 1478, para poner fin a la acumulación de cuentas pendientes desde 1454, en el Reino de Castilla . Se confirió a la Contaduría la facultad exclusiva y absoluta de reclamar, censurar y rechazar todas las cuentas de los funcionarios públicos que manejan caudales y efectos. A los Contadores Mayores se les dio la responsabilidad de revisarlos, los tomados y completados, así como determinar y juzgar el alcance de las cuentas. También están autorizados para proceder contra cualquier persona o Consejo, y les permiten actuar en nombre de los Reyes.

En los últimos años del reinado del rey Carlos I , el 10 de julio de 1554, se concedieron en Valladolid nuevas órdenes reales a los Contadores Mayores. Aumentaron el número de contadores y el importe del derecho de alojamiento (era obligación de los ciudadanos prestar habitación a los servidores del Rey durante su estancia en la ciudad). Era también la primera vez que, en un proceso judicial de cuentas, cuando las cuentas eran consideradas extraordinarias, o con alguna modificación, las normas incluían la obligación de las personas que han estado a cargo de las cuentas de prestar juramento sobre la veracidad de las mismas. datos confusos.

En el reinado de Felipe II , los Contadores Mayores fueron asistidos por abogados que les asesoraban y se creó el Consejo de Hacienda. En 1593, una nueva reforma en el sistema contable hizo que el Consejo del Rey perdiera sus competencias en materia de contabilidad y estas pasaran al Consejo de Hacienda, y se crearon incompatibilidades para los Contadores Mayores, no permitiéndoles tener otro trabajo en el mismo hora.