El duelo ecológico , también conocido como duelo climático , puede ser una respuesta psicológica a la pérdida causada por la destrucción del medio ambiente o el cambio climático . [1] [2] [3] [4] [5]
El tanatólogo Kriss Kevorkian define el dolor ambiental como "la reacción de dolor derivada de la pérdida ambiental de los ecosistemas por eventos naturales y provocados por el hombre". [6] Cunsolo y Ellis lo definen como "el dolor que se siente en relación con las pérdidas ecológicas experimentadas o anticipadas , incluida la pérdida de especies , ecosistemas y paisajes significativos debido a cambios ambientales agudos o crónicos". [7]
Los científicos que presencian el declive de la Gran Barrera de Coral de Australia informan sobre experiencias de ansiedad , desesperanza y desesperación . [8] En un artículo de The Guardian de 2014 , Jo Confino preguntó: "¿Por qué no estamos en el piso doblado de dolor por nuestra capacidad de genocidio a escala industrial de las especies del mundo?" [9]
El modelo emergente de duelo climático sugiere que las personas pueden procesar la desesperación climática, o la ansiedad climática, a través de las etapas del duelo , y que formar redes de apoyo social es parte de este proceso. [10]
Cunsolo y Ellis sugieren que "el duelo es una respuesta natural y legítima a la pérdida ecológica, y una que puede volverse más común a medida que empeoran los impactos climáticos". [11]
Los comunicadores climáticos pueden centrarse inicialmente en comunicar los impactos climáticos y la adaptación en lugar de los aspectos del duelo. [12] Comunicadores como el Programa de Yale sobre Comunicación sobre el Cambio Climático a menudo han abordado la cuestión del duelo haciendo hincapié en la importancia de describir soluciones. Intentar canalizar la ansiedad climática hacia la acción en busca de soluciones es consistente con el enfoque descrito por Sherman H. Dryer, Director de Producciones de Radio de la Universidad de Chicago, en su manual para la propaganda de la Segunda Guerra Mundial, en el que las comunicaciones por radio sobre la guerra siempre terminan con un mensaje sobre cómo el oyente puede apoyar el esfuerzo de guerra. [13]