Terapia educativa


La terapia educativa es una forma de terapia utilizada para tratar a personas con dificultades de aprendizaje , discapacidades y desafíos. Esta forma de terapia ofrece una amplia gama de intervenciones intensivas que están diseñadas para resolver los problemas de aprendizaje de los alumnos. Estas intervenciones son individualizadas y únicas para el alumno específico.

Este tipo de terapia [1] ayuda al estudiante a fortalecer su capacidad de aprendizaje. El estudiante participa en actividades que ayudan a su comprensión académica, así como también, les enseñan habilidades de procesamiento, concentración y memoria. Hay una diferencia entre la tutoría tradicional y la terapia educativa. La tutoría tradicional se ocupa específicamente de lo académico, mientras que la terapia educativa se ocupa tanto del procesamiento de la información como de lo académico. El terapeuta educativo utiliza una variedad de metodologías y materiales didácticos para ayudar al estudiante a desarrollar su competencia académica .

El procesamiento es la forma en que los estudiantes piensan y aprenden. Todos los estudiantes aprenden de manera diferente y procesan la información de una manera única. La información se capta a través de los cinco sentidos . Algunos estudiantes aprenden mejor mirando ( aprendizaje visual ), mientras que otros aprenden mejor escuchando ( aprendizaje auditivo ). Los estudiantes que parecen tener peor desempeño en el entorno escolar tradicional aprenden mejor haciendo ( aprendizaje cinestésico ). Si a estos estudiantes se les enseña a fortalecer sus sistemas de aprendizaje más débiles, entonces el aprendizaje se vuelve más fácil y eficiente.

Algunos estudiantes tienen problemas para concentrarse. Los déficits de atención hacen que el alumno sea menos receptivo al aprendizaje. Si el estudiante no es receptivo a la información que se presenta, el estudiante no aprende. Los métodos tradicionales implican ayudar al estudiante a mejorar, por otro lado, los terapeutas educativos trabajan con los estudiantes y les enseñan cómo enfocarse y atender lo que se les presenta.

Se espera que los estudiantes de hoy tengan grandes cantidades de información en sus bancos de memoria. Muchos estudiantes también son débiles en esta área. Las habilidades de la memoria se pueden fortalecer como cualquier habilidad, lo que a su vez afecta a los académicos de manera positiva.

Los ejercicios cinestésicos laterales cruzados pueden usarse para fortalecer las habilidades de propiocepción . Se cree que estos ejercicios físicos fortalecen las habilidades cognitivas. [2]