Resolución 1623 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas , aprobada por unanimidad el 13 de septiembre de 2005, tras reafirmar todas las resoluciones sobre la situación en Afganistán , en particular las resoluciones 1386 (2001), 1413 (2002), 1444 (2002), 1510 (2003) y 1563 (2004) y las resoluciones 1368 (2001) y 1373 (2001) sobre terrorismo, el consejo prorrogó la autorización de la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad (ISAF) hasta mediados de octubre de 2006 [1].
El consejo de seguridad reconoció que la responsabilidad de garantizar la seguridad y el orden público en todo Afganistán recaía en los propios afganos. Recordó el Acuerdo de Bonn y su disposición para la expansión progresiva de la ISAF a otras áreas más allá de Kabul. El consejo también destacó la importancia de la expansión de la autoridad del gobierno central, la reforma del sector de la seguridad y el desarme integral , la desmovilización y la lucha contra el narcotráfico . Preocupaba que el Acuerdo de Bonn no pudiera aplicarse plenamente debido a la situación de seguridad en algunas partes del país.
La resolución acogió con satisfacción la cooperación de la Administración de Transición afgana y la intención de la ISAF y la Operación Libertad Duradera de ayudar en las elecciones nacionales . [2] También agradeció a Italia por tomar el liderazgo de la ISAF en lugar de Turquía , y elogió a las naciones que habían contribuido al Eurocuerpo . El Consejo determinó que la situación en Afganistán era una amenaza para la paz y la seguridad internacionales.
Actuando en virtud del Capítulo VII de la Carta de las Naciones Unidas , el consejo amplió el mandato de la ISAF por un período de doce meses después del 13 de octubre de 2005. Se pidió a la ISAF que trabajara con la administración de transición y sus sucesores, el Representante Especial del Secretario General y Operación Libertad Duradera. [2]
Se autorizó a los Estados que participaban en la fuerza a utilizar todas las medidas necesarias para cumplir con el mandato, mientras que a otros Estados miembros se les pidió que aportasen personal y recursos a la operación. Finalmente, se solicitó a la dirección de la ISAF que proporcionara informes trimestrales sobre la implementación de su mandato. [3]