Abraham ben Samuel Cohen de Lask


Abraham ben Yechiel-Michel Catz Ha Cohen de Lask (Yechiel-Michel era nieto del mártir Yechiel-Michel Ha Cohen de Nemirov ). Abraham fue un asceta judío que floreció a finales del siglo XVIII. Se fue a vivir a Jerusalén en 1785, pero luego viajó por Europa como agente para la recolección de donaciones para los judíos polacos en Eretz Yisrael , convirtiendo a Ámsterdam en su centro; murió como Hakam en Safed , durante un motín contra los judíos, que habían protestado contra los impuestos excesivos. Otra versión dice que fue castigado por los turcos, en Jerusalén, (ver abajo) y murió en Safed, en 1799, allí fue enterrado. No tuvo hijos.

Abraham (hermano de Samuel Catz de Lask) fue un asceta de un tipo notable; ayunaba seis días de la semana, desde la noche del sábado hasta la víspera del sábado, pero festejaba con bastante lujo el sábado. A menudo dedicaba días y noches enteros al estudio de la Torá, de pie durante ese tiempo. Tomaba sus abluciones diarias en el río antes de ofrecer sus oraciones por la mañana, a menudo rompiendo el hielo en invierno con este propósito. Sin embargo, a pesar de toda esta austeridad, era un hombre de un vigor poco común.

Una vez en Tierra Santa , junto con un número de eruditos judíos, Abraham fue arrastrado a prisión por algunos funcionarios turcos y sometido al bastinado , sin otra razón que la de que era el método habitual seguido por el gobierno turco para extorsionar dinero de los judios. Abraham y otro rabino solo sobrevivieron. En cada golpe recibido, Abraham pronunciaba la frase rabínica, גם זו לטובה ("Esto también es lo mejor"). Fue reverenciado por los mejores hombres de la época como "el santo varón de Dios".

Publicó varias homilías cabalísticas , una bajo el título de Weshab ha-Kohen (El sacerdote volverá), Livorno, 1788; otro, Wechishab lo ha-Kohen (El sacerdote deberá contar), Fürth, 1784; una tercera, Bet Ya'akob (Casa de Jacob), Leghorn, 1792; y un cuarto, Ayin Panim ba-Torah (Setenta Significados de la Ley), Varsovia, 1797. El último trabajo da setenta razones para el orden de las secciones en el Pentateuco , así como setenta razones por las que la Ley comienza, "En el principio creó Dios los cielos y la tierra» ( Gén. i.1). Todos están llenos de fantásticas combinaciones numéricas y alfabéticas.

 Este artículo incorpora texto de una publicación ahora de dominio públicoKaufmann Kohler (1901–1906). "Abraham ben Samuel Cohen de Lask" . En Cantor, Isidoro ; et al. (eds.). La Enciclopedia Judía . Nueva York: Funk & Wagnalls.Su bibliografía: