Gertrud Svensdotter (1656-1675) fue una campesina sueca . Fue testigo y acusadora en el juicio de brujas contra Märet Jonsdotter en 1668, el juicio que desató la gran histeria de brujas en Suecia llamado Stora oväsendet (Gran Ruido), que involucró una serie de juicios de brujas en muchas partes de la nación y que duró hasta 1676. .
Gertrud era la hija del granjero Sven Hwass: su apellido "Svensdotter" era un patronímico que significa "hija de Sven" ("dotter" que significa "hija"). En 1664, su madre murió al dar a luz y fue enviada a Älvdalen en Dalarna para vivir con su abuelo Jon. Cuando murió el año siguiente, ella se convirtió en la hija adoptiva de sus tías paternas, Elin Jonsdotter y Chirstin Jonsdotter en Åsen. [1]Gertrud parece haber sido particularmente cercana a Chirstin, quien nunca estuvo involucrada en el futuro juicio de brujas ni se acusó a sí misma. En 1652, había sido objeto de una investigación por parte de las autoridades porque había tomado como amante a un hombre casado, un hombre que se negó a poner fin a su relación a pesar de que las autoridades le ordenaron hacerlo, pero nunca fue castigada por ello. La familia de Gertrud pertenecía a los campesinos más acomodados. [1]
En el otoño de 1667, Gertrud cuidaba un rebaño de ovejas con el pastor Mats Nilsson. Tuvieron una pelea y Gertrud golpeó a Mats. Más tarde, Mats Nilsson afirmó que Gertrud había llevado a las ovejas por el este de Dalälven caminando sobre el agua en Hemmansäng por Åsen . Ella tenía doce años en ese momento. [1]
A continuación, Gertrud Svensdotter fue interrogada por el sacerdote, Lars Elvius, quien la animó a decir que sí había caminado sobre el agua y que lo había hecho por arte de magia, que le había dado el diablo . Después de largas conversaciones con el vicario, Gertrud dijo que mientras vivía con sus padres en Lillhärdal en Härjedalen , la criada de un vecino la había llevado al Diablo. El nombre de la sirvienta era Märet Jonsdotter .
Gertrud Svensdotter hizo una detallada confesión al sacerdote. Afirmó que, en 1663, cuando tenía ocho años, Märet la había llevado a dar un paseo. Habían pasado un pozo de arena y luego llegaron a una encrucijada de tres vías, donde Märet había gritado: "¡Tú, diablo, avanza!" Afirmó que Satanás había aparecido entonces en forma de vicario. Habían cenado y, a la noche siguiente, Märet había ido a Gertrud y untó su cuerpo y una de las vacas de su padre con aceite rojo, después de lo cual volaron por la chimenea y llegaron hasta Satanás.
Desde entonces, Gertrud había visitado Blockula con frecuencia , ordeñaba ganado con familiares , se untaba los pies con aceite para caminar sobre el agua y llevaba a los niños a Blockula, donde sus nombres estaban escritos en un libro con páginas negras. La razón por la que había admitido esto era que había conocido a un ángel en Blockula, un hombre de blanco, que le había dicho que confesara, o de lo contrario una epidemia de hambre se apoderaría del reino.