Mateo 11:27 es el versículo 27 del capítulo once del Evangelio de Mateo en el Nuevo Testamento .
"Todas las cosas me son entregadas", parece implicar que "a través del Hijo solamente, el padre obra, enseña y otorga Sus dones".
"Nadie sabe..." muestra que Dios Padre comunica el conocimiento de Sí mismo y de todo lo demás al Hijo, ya través de Él al resto de la humanidad. La pregunta es, si el Espíritu Santo está excluido de esta relación entre el Padre y el Hijo, sin embargo, los teólogos dicen que este no es el caso en la Deidad. Marción , rechazó el Antiguo Testamento basado en este versículo ya que afirmó que nadie podría haber conocido a Dios antes de que Cristo viniera. [1] [2]
Crisóstomo : "Por cuanto había dicho: Te lo confieso, Padre, porque has escondido estas cosas de los sabios, para que no supongas que Él agradece así al Padre como si Él mismo estuviera excluido de este poder, añade: Todos cosas me son encomendadas por mi Padre. Oyendo las palabras encomendadas, no admitáis sospecha de ninguna cosa humana, porque Él usa esta palabra para que no penséis que hay dos dioses no engendrados. Porque en el tiempo en que Él fue engendrado Él era Señor de todo." [3]
Jerónimo : "Porque si concebimos esto de acuerdo con nuestra debilidad, cuando el que recibe comienza a tener, el que da comienza a estar fuera. O cuando dice: Todas las cosas le son encomendadas, puede significar, no el cielo y la tierra y los elementos, y las demás cosas que él creó e hizo, sino los que por el Hijo tienen acceso al Padre”. [3]
Hilario de Poitiers : "O para que no pensemos que hay algo menos en Él que en Dios, por eso dice esto". [3]