Políticas de medicamentos esenciales


Una política de medicamentos esenciales es aquella que tiene como objetivo garantizar que las personas obtengan medicamentos de buena calidad al precio más bajo posible y que los médicos prescriban el mínimo de medicamentos necesarios para tratar la enfermedad del paciente. Los pioneros en este campo fueron Sri Lanka y Chile .

Una política farmacéutica racional es aquella basada en el uso de medicamentos en la que los pacientes reciben medicamentos adecuados a sus necesidades clínicas, en dosis que satisfacen sus propios requisitos individuales, durante un período de tiempo adecuado y al menor costo para ellos y su comunidad. Las empresas farmacéuticas ganan una cantidad considerable de dinero vendiendo medicamentos con sus nombres comerciales , promocionando los medicamentos de marca frente a los que se denominan genéricamente. Los médicos suelen recetar medicamentos de marca que son más caros que los medicamentos genéricos que tienen la misma eficacia.

En las décadas de 1960 y 1970, Chile intentó introducir una política racional, basada en un número limitado de medicamentos esenciales . La política farmacéutica chilena fracasó por la presión de la industria farmacéutica . En la década de 1970, Sri Lanka demostró que una agencia de compras estatal vinculada a un formulario nacional era un instrumento viable y poderoso para reducir los costos de los medicamentos sin comprometer la calidad, para ahorrar divisas, para racionalizar el uso de medicamentos y para suministrar medicamentos esenciales a precios razonables para el conjunto. comunidad. Esto fue posible gracias a la formulación e implementación de una política farmacéutica nacional integrada.

Bajo una política farmacéutica nacional integrada, la agencia central de compras canaliza todas las importaciones y la producción de productos farmacéuticos, convocando a licitaciones a granel en todo el mundo que se limitan a los medicamentos aprobados enumerados en el formulario nacional. Los sectores de salud público y privado deben obtener todos sus requisitos de la agencia central de compras.

En Chile, en 1971, el gobierno del Dr. Salvador Allende organizó compras a granel centralizadas y se convocó la primera licitación internacional de materias primas. Sin embargo, la industria farmacéutica contraatacó y, en los tres meses siguientes a la licitación, desaparecieron del mercado medicamentos de uso generalizado, incluidos analgésicos y antibióticos. Los fabricantes habían recortado su producción. Acordaron reabastecer el mercado en una semana solo si se cancelaban las licitaciones internacionales. En 1972, el gobierno se vio obligado a sucumbir y canceló las licitaciones.

En Sri Lanka, Sri Lanka State Pharmaceuticals Corporation (SPC) se estableció en 1972 con Bibile como presidente. De ahí que se rompiera con éxito el dominio de las multinacionales sobre el narcotráfico y se las obligó a competir entre sí y con los productores de medicamentos genéricos, lo que permitió al país obtener medicamentos mucho más baratos. Los medicamentos de marca fueron reemplazados por medicamentos genéricos en la prescripción y venta de medicamentos.