Codillo de cerdo y estofado de jengibre
El estofado de codillo de cerdo y jengibre ( chino :豬腳薑; pinyin : zhū jiǎo jiāng ; cantonés Yale : jyū geuk gēung ) es un plato de la cocina tradicional cantonesa . Es tradicionalmente consumido por las nuevas madres en Guangzhou para restaurar la fuerza y la salud, y se presenta a amigos y familiares para indicar la llegada de un nuevo bebé.
Según la leyenda, a principios de la dinastía Ming [1] vivía un carnicero que tuvo la suerte de casarse con una chica muy bonita, amable y vivaz. Sin embargo, incluso después de varios años de matrimonio, la esposa todavía no tenía hijos. En la cultura feudal china tradicional, no tener un descendiente para continuar con el apellido familiar es una ofensa grave contra la piedad filial . Por lo tanto, la madre del carnicero obligó a los dos a divorciarse.
La esposa estaba desconsolada y abandonó la casa familiar y se mudó a una choza en una colina. Sin embargo, para su propia sorpresa descubrió que ahora estaba embarazada.
El carnicero aún amaba a su esposa y la visitaba. Cuando recibió la noticia de su embarazo, temió que su esposa y el recién nacido estuvieran desnutridos, así que le trajo unos codillos de cerdo sin vender y los guisó en vinagre negro dulce en una olla grande junto con jengibre y huevos.
Después de varios años, el niño finalmente creció. La esposa perdonó a la madre del carnicero y regresó con su hijo a la casa conyugal y le pidió a su hijo que llevara consigo una olla de guiso de vinagre dulce como regalo para su abuela. Su abuela estaba encantada de recibirlo a él y al guiso.
A partir de entonces, cada vez que nazca un bebé, la familia preparará una olla de estofado de vinagre dulce y lo compartirá con amigos y vecinos.
