Mercado abierto


El término mercado abierto se usa generalmente para referirse a una situación económica cercana al libre comercio . En un sentido técnico más específico, el término se refiere al comercio interbancario de valores .

Los economistas juzgan la "apertura" de los mercados según la cantidad de regulación gubernamental de esos mercados, el alcance de la competencia y la ausencia o presencia de costumbres culturales locales que se interponen en el camino del comercio. En principio, un mercado completamente abierto es un mercado completamente libre en el que todos los actores económicos pueden comerciar sin ninguna restricción externa. En realidad, existen pocos mercados que estén tan abiertos, ya que por lo general no pueden operar sin un marco legal exigible para el comercio que garantice la seguridad de la propiedad, el cumplimiento de las obligaciones contractuales asociadas con las transacciones y la prevención de trampas .

Un mercado abierto físico es un espacio en el que cualquier persona que desee intercambiar bienes físicos puede hacerlo sin cargos ni impuestos de venta, y ha llegado a ser considerado por muchos activistas como la empresa social definitiva y una herramienta importante para abordar el desempleo.

En un sentido más general, el término ha comenzado a utilizarse en economía y economía política , en las que un mercado abierto se refiere a un mercado accesible a todos los actores económicos. En un mercado abierto así definido, todos los actores económicos tienen las mismas oportunidades de entrada en ese mercado. Esto contrasta con un mercado cerrado por un monopolio que domina una industria, y con un mercado protegido en el que la entrada está condicionada a ciertos requisitos financieros y legales o que está sujeto a barreras arancelarias , impuestos, gravámenes o subsidios estatales que impiden efectivamente a algunos actores económicos de participar en ellos (ver proteccionismo ).

El concepto de mercado abierto en este sentido general a veces es criticado sobre la base de que la participación en él está condicionada a tener suficiente dinero, ingresos o activos. Al carecer de suficiente dinero, ingresos o activos, las personas pueden verse efectivamente excluidas de la participación. Así, mientras que las personas pueden tener fondos suficientes para participar en algunos mercados, sus fondos son inadecuados para participar en otros mercados. Esto plantea la cuestión de si los mercados están realmente "abiertos" y sugiere que la "apertura" de los mercados es más un concepto relativo. En respuesta a este tipo de críticas, el concepto de mercado abierto a menudo se redefine para significar una situación de libre competencia., y la imposibilidad de participar se explica como falta de competitividad. Desde este punto de vista, si las personas fueran más competitivas, podrían participar y, por lo tanto, su falta de fondos se debe a su falta de voluntad para competir por los recursos. Desde este punto de vista, la falta de participación en un mercado abierto es una preferencia subjetiva o un defecto personal.

En economía bancaria y financiera , el mercado abierto es el término utilizado para referirse al entorno en el que se compran y venden bonos entre un banco central y sus bancos regulados. No es un proceso de libre mercado.